Los 33 mineros que permanecieron 70 días al interior de un yacimiento del norte de Chile recibieron un emotivo homenaje en Santiago, donde visitaron el palacio presidencial de La Moneda y fueron condecorados por el gobierno de Sebastián Piñera con la medalla del Bicentenario.
"Estamos totalmente agradecidos de todos ustedes, de nuestro presidente, de nuestros ministros y de todos los que lucharon por nosotros", manifestó Luis Urzúa, jefe de turno del grupo que estuvo atrapado desde el 5 de agosto, y quien habló a nombre de los trabajadores.
Cada uno de los 33 mineros recibió de manos de las autoridades la medalla, una copia a escala de la cápsula "Fénix 2" que los trajo de vuelta a la superficie, y la bandera que los simbolizó en un altar de La Moneda durante todo el tiempo que estuvieron a 700 metros de profundidad.
"Me siento emocionado en estos momentos porque sé que todo Chile y mucha gente en las calles nos da las bendiciones. Mucha gente ha llorado por nosotros, lo hemos palpado, y esa gente es la que necesitamos en Chile porque Chile es de nosotros", fueron las palabras de Luis Urzúa.
En la ceremonia también fueron homenajeados los seis socorristas que participaron en la "operación San Lorenzo", quienes descendieron hasta el taller donde estaban los mineros para coordinar desde abajo el izamiento a través del ducto.
Cada minero recibió una medalla, una copia a escala de la cápsula "Fénix 2" y la bandera de Chile.
En la ceremonia en que estuvo presente todo el gabinete ministerial, Sebastián Piñera colmó de elogios a los mineros y los destacó como un ejemplo a seguir, pero además dijo que el estado tiene que sacar conclusiones de este accidente y mejorar las condiciones de los trabajadores.
"Aprendimos la lección y en estos días vamos a anunciar un nuevo trato en materia laboral para que el respeto a la vida, a la integridad, a la dignidad y a la salud no solamente de nuestros mineros sino de todas nuestras trabajadoras y trabajadores sea parte del alma y de la cultura de nuestro país", manifestó.El presidente además aseguró que lo ocurrido en la mina San José, ubicada en las cercanías de Copiapó, a unos 800 kilómetros al norte de Santiago, "fue como un faro que nos ha guiado, que nos ha inspirado y que nos ha iluminado" rumbo a los nuevos desafíos.
"De nosotros depende en qué país queremos desarrollar nuestras vidas, en qué país queremos que vivan nuestros hijos y los que vendrán después de nuestros hijos. Debemos enfrentar los desafíos que tenemos por delante", señaló.
Los mineros volvieron a ver a "Fénix 2", en su versión original y en una versión más pequeña.
Los mineros fueron el centro de atención del acto celebrado en La Moneda, pero también acapararon las miradas de los centenares de personas que esperaron desde temprano en las afueras del palacio presidencial para saludarlos.
"Estoy emocionado, no esperaba esto, y fue espectacular. La gente nos está recibiendo como mineros, y es fabuloso", dijo a BBC Mundo Mario Gómez, uno de los trabajadores más experimentados del grupo.
En la plaza de la Ciudadanía los obreros pudieron acercarse a la gente y firmar más de un autógrafo, para luego volver a estar junto a la cápsula "Fénix 2" que los rescató, y fotografiarse con ella.
"Esto hay que tomarlo con calma y más adelante se va a ver. En algún momento vamos a descansar, pero por ahora hay que disfrutarlo", expresó Gómez, quien lucía orgulloso una camiseta que le envió el delantero alemán del mismo nombre, quien juega en el Bayern Munich justamente con el número 33 en la espalda.
Los mineros ahora enfrentan el desafío de ser figuras públicas.
Luego de la recepción en la casa de gobierno, los 32 mineros chilenos y uno boliviano se trasladaron hasta el estadio Nacional, donde disputaron un encuentro de 16 jugadores por lado contra el equipo de las autoridades que capitaneó Piñera.
Con un gol del mandatario incluido, el equipo de la Operación Rescate derrotó por 3-2 al conjunto Esperanza de los mineros, que tuvieron al ex futbolista Franklin Lobos como una de sus mejores figuras.
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