La jueza del Segundo Juzgado de la Instrucción del Distrito Nacional, Clarivel Nivar Arias, desde este lunes inició una nueva etapa en el juicio que le sigue a los implicados en la red de Figueroa Agosto, en la que entiende no es conveniente la presencia de los medios de comunicación y personas ajenas al proceso, por lo que ayer impidió a los comunicadores estar presentes, así como el viernes próximo cuando el Ministerio Público presentará la acusación formal.
La audiencia de este lunes fue pospuesta, porque cuando los fiscales adjuntos se prestaban a leer la acusación formal, el abogado de Mary Pelaez Frappier pidió la posposición del juicio para el viernes, porque su defendida estaba siendo afectada en ese momento de una alergia. Sin embargo, al iniciar el juicio preliminar, Nivar Arias se negó a aplazarlo hasta tanto la Suprema Corte de Justicia se pronuncie respecto a un recurso de casación presentado por los abogados de la defensa en contra de varios incidentes que la magistrada rechazó.
Según la magistrada, el objetivo de la medida es cuidar la honra de terceras personas que sean mencionadas en la acusación así como de José Figueroa Agosto y Leavy Nin Batista, a quienes pidió a los fiscales adjuntos sean declarados en rebeldía.
En la pieza acusatoria, se imputa a José Figueroa Agosto y nueve personas más de lavado de activos. A éste y a Sobeida Félix Morel se les acusa de manera particular de promoción del narcotráfico (sólo a él) y porte y tenencia de arma de fuego (a ambos).
La magistrada solicitó al Ministerio Público que Figueroa Agosto y Nin Batista sean declarados en rebeldía y lo vetó para presentar la acusación contra ellos el próximo viernes, aduciendo que él está preso en una cárcel federal de Puerto Rico y ella, se presume, huyó a Europa.
Nivar Arias ordenó este lunes al Ministerio Público, integrado por Milcíades Guzmán Leonardo, Wendy Lora Pérez, José Agustín de la Cruz Santiago y Bienvenido Fabián Melo, presentar la acusación de manera oral y privada el próximo viernes.
Los abogados defensores inmediatamente se pronunciaron en contra de la medida, alegando que la magistrada quiere impedir que la sociedad se entere de que el grupo que está siendo juzgado es un chivo expiatorio.
El abogado de Mary Pelaez, José Rafael Ariza, dijo que la jueza se extralimitó en sus funciones, porque ninguno de los abogados pidió que la presentación de la acusación fuera a puerta cerrada, en un caso en el que no hay ningún secreto oficial y en el que el mismo Ministerio Público ya ha dañado la honra de las personas implicados, en especial las mujeres.
Mientras que el abogado de Dolphy Pelaez entiende que con la medida se mutila el derecho de los medios de comunicación a informar, además de que las audiencias a puerta cerrada sólo se contemplan para la lectura de las medidas de coerción.
El ejemplo de Banínter
La jueza del Tercer Juzgado de la Instrucción del Distrito Nacional puso como ejemplo el caso Banínter para justificar su decisión de presentar la acusación formal a puerta cerrada, dado que cuando se iba a presentar la acusación contra Ramón Báez Figueroa y demás imputados en un multimillonario fraude bancario, los periodistas fueron sacados de la sala de audiencia del Primer Tribunal Colegiado del Distrito Nacional.
Los acusados
Son José David Figueroa Agosto (preso en Puerto Rico), Leavy Nin Batista (prófuga), Sobeida Félix Morel (amante de Figueroa Agosto), Eddy Brito Martínez (ex marido se Sobeida), Juan José Fernández Ibarra, Sammy Dauhajre, Ricardo Ivanovich Smeter, Mary y Dolphy Pelaez y Madeline Bernard Peña (viuda del coronel José Amado González González).
Los muertos que
Se presume que en el juicio hubiesen podido estar hoy acusadas otras personas más de no haber sido asesinadas o por Figueroa Agosto o por sectores de la seguridad del Estado vinculados a la red, las cuales no querían ser delatadas.
Los muertos de este caso son: el coronel José Amado Gónzalez Gónzalez (compadre de Figueroa Agosto), Rubén Soto Hayek (suegro del coronel), Gabriel Arias Castillo (Alex El pelotero), (a quien se le encontraron las armas del caso), Omar Antigua Polanco (supuesto lugarteniente de Figueroa Agosto), así como dos hombres que fueron acribillados en La Francesa, cuando fue asesinado Soto Hayek, por el siemple hecho de haber visto a los sicarios que cumplieron el encargo.
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