SANTO DOMINGO- El dirigente reformista Amable Aristy Castro reunió este jueves como secretario general de la Liga Municipal Dominicana (LMD) para juramentarse como senador de la provincia La Altagracia.
Aristy Castro optó por la renuncia luego de que comprobara que eran escasas las posibilidades de ser reelecto en la secretaría de la LMD, cargo que ocupaba desde hacia tiempo.
La víspera el presidente del Senado, Reinaldo Pared Pérez, le advirtió que que el plazo constitucional y legal para él juramentarse como senador por la provincia de la Altagracia, vence el 14 de este mes, y que de no hacerlo el Senado solicitaría al Partido Reformista Social Cristino (PRSC), que envíe una terna para llenar la vacante.
No se ha especificado cuándo Amable se juramentará como senador de la provincia La Altagracia, posición para la cual fue electo en las elecciones del 16 de mayo.
El ministro de Interior y Policía, Franklin Almeyda Rancier, desempeñará interinamente las funciones de secretario de la LMD, hasta tanto sea electo el nuevo titular, como lo establece la Ley Municipal.
Almeyda dijo que ha conversado con representantes de la Federación Dominicana de Municipios (FEDOMU) para que juegue un rol activo en la elección del sustituto de Aristy Castro, el cual ocupará el cargo de manera interina hasta el 15 de enero del próximo año, cuando la Asamblea General de Municipios elegirá un Secretario definitivo.
Someten Ley busca disolver LMD
En momentos que se habla que Aristy Castro deja la Liga Municipal Dominicana (LMD) para juramentarse como senador por su provincia, el Senado fue apoderado de un proyecto de ley que busca disolver esa entidad que regula los fondos de los ayuntamientos y traspasa sus activos y pasivos al Ministerio de Interior y Policía.La pieza legislativa, original del senador Eddy Mateo Vásquez (PLD-Barahona), propone que sea derogada la ley 49 del 23 de diciembre del 1938, que crea la LMD.
En sus considerandos, el proyecto expresa que a lo largo de su existencia, la LMD jugó en algún momento un rol estelar en materia de asesoría técnica y como árbitro financiero de los cabildos.
Sin embargo, agrega, el desarrollo institucional y la fortaleza administrativa que han alcanzado las alcaldías en los últimos años han permitido que hayan escalado significativos niveles de autonomía y las convierten en entidades jurídicas que se bastan por sí mismas, por lo que sólo requieren supervisión financiera y asesoría técnica de estamentos del Estado facultados para ello, sin necesidad de la intermediación de la LMD, organismo que dice no tiene razón de ser como organismo asesor de los cabildos
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