ROMA.- El periódico de la Santa Sede “L'Osservatore Romano” despliega con texto y fotos a color en su edición diaria la misa con la cual el Cardenal Gianfranco Ravasi, presidente del Consejo Pontificio de la Cultura, dió inicio a las celebraciones de los 500 años de lacreación, en Santo Domingo, del primer Episcopado de América con unabula del papa Julio II del 1511.
Del cuerpo diplomático acreditado ante la Santa Sede asistió una nutrida representación: los Embajadores de los Estados Unidos, España,Canadá, México, Cuba, Chile, Brasil, Colombia, Turquía, Serbia,
Filipinas, Portugal, entre otros Embajadores de América Latina, Europay Asia. También el Embajador de la República Dominicana ante la República Italiana Vinicio Tobal, el Embajador Mario Arvelo, Embajador de la República Dominicana ante las Agencias de la ONU con sede en Roma y funcionarios de ambas Misiones. La comunidad de dominicanos en Roma participó en esta sencilla pero sentida Eucaristía. Como siempre Nuestra Señora de la Altagracia es punto de encuentro de los dominicanos.
Con motivo de las celebraciones, que tuvieron lugar en la iglesia de San Giovanni dei Fiorentini, el Cardenal Ravasi leyó una oración consagrada por el Papa Juan Pablo II a la Virgen de La Altagracia,
protectora del pueblo dominicano. Como parte de los festejos del 500 aniversario, la Santa Sede será Invitada de Honor en la Feria Internacional del Libro de Santo Domingo, el próximo mes de mayo.
Este año, la misa que la Embajada ante la Santa Sede dedica a Nuestra Señora de La Altagracia se celebró simultáneamente con los oficios religiosos que tuvieron lugar en todo el territorio dominicano, sobre todo en la Basílica de Higüey. Juan Pablo II visitó esta Basílica en octubre de 1992 durante las celebraciones del Quinto Centenario de la Evangelización del Nuevo Mundo.
En aquella ocasión, el Santo Padre leyó la oración de consagración que se rezó el 21 de enero durante la misa celebrada en Roma. El Cardenal Gianfranco Ravasi, al momento de la homilía dijo a la
asamblea lo contento que se siente por el lazo que ahora le une a República Dominicana y que se ha creado a través del contacto con el Embajador Victor Manuel Grimaldi Céspedes, y las Autoridades del
Ministerio de la Cultura de la República Dominicana, para la organización de la participación de la Santa Sede como invitado de honor en la Feria Internacional del Libro de Santo Domingo a celebrarse en mayo próximo.Destacó también los lazos con el Presidente de la Conferencia del Episcopado Dominicano, Cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez, Arzobispo Metropolitano de Santo Domingo, Primado de América.
Concelebraron con el Cardenal Gianfranco Ravasi, los sacerdotes Monseñor Luigi Vetturi, párroco de San Giovanni dei Fiorentini, el Padre Miguel Ángel Reyes, del Pontificio Consejo de Cultura, y los sacerdotes dominicanos Milcíades Florentino y Eugenio Rivas. Como acólitos asistieron Rafael Santana, seminarista dominicano de los Agustinianos y Simone F., de San Giovanni dei Fiorentini. Monseñor Francisco J. Froján Madero, de la Secretaría de Estado representó la Santa Sede.
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