El empresario artístico Franklin Romero, acusado por las autoridades norteamericanas de narcotráfico y lavado de activos, formó parte de las filas de la Policía Nacional como “asimilado honorífico”, desde el 8 de marzo del 2005 hasta el 23 de febrero del 2011.
Según una información revelada este jueves por el comentarista de El Gobierno de la Tarde, Dr. Ricardo Nieves, Franklin Romero, cuyo nombre completo es Franklin Martín Romero Morillo, cuando fue asimilado como honorífico, en su expediente aparece que él no tenía ningún antecedente delictivo.
Romero es presidente de la compañía Premium Latin Music con sede en Estados Unidos, empresa que tiene en su catálogo al Grupo Aventura, Anthony Santos, Rita Indiana, Eddy Herrera, Wason Brazobán, entre otros.
Aunque en su registro de ingreso a la Policía dice que su domicilio es en la calle 5ta. #15, Residencial La Moraleja, en Santiago, Romero residía en una lujosa mansión del exclusivo sector Cerros de Gurabo de dicha ciudad. Y hacía una vida normal en Santiago.
El Bar Tete, un centro nocturno frecuentado por personas de clase media y alta, también es de su propiedad, y se dice que uno de sus vehículos tenía placa oficial.
El viernes 25 de febrero Romero fue capturado en Panamá por agentes de la Interpol acusado de narcotráfico y lavado de activos. El 3 de marzo se le otorgó una fianza de 820 mil dólares y arresto domicialiario.
El empresario deberá regresar a la Corte Federal el próximo 12 de mayo para una nueva audiencia fijada a las 4:05 de la tarde.
Otros honoríficos de la PN
La misma suerte de Romero la corrió un extranjero. El señor Arturo del Tiempo Marqués, de nacionalidad española, fungía como asimilado honorífico de la Policía. Guarda prisión en España imputado de tráfico y consumo de drogas. Las autoridades incautaron la torre Atiemar que cosntruyó en la avenida Pedro Henríquez Ureña, sector La Esperilla.
Asimismo, José David Figuera Agosto, imptuado de encabezar una rred de narcotraficantes, tenía carnet del Departamento Nacional de Investigaciones (DNI).
Trascendió que además de estas tres figuras relacionadas directamente con organismos oficiales del país, hay muchas otras personas, de reputación dudosa, que figuran dentro de las filas de los cuerpos castrenses, como fue el caso también de Quirino Ernesto Paulino Castillo, extraditado y preso en Estados Unidos luego que se le apresara en la República Dominicana por actividades de narcotráfico, y quien llegó a desempeñar las funciones de capitán del Ejército Nacional.
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