La empresa minera Barrick Gold dispuso esta tarde de seis bombas de alto cilindraje para extraer miles de metros cúbicos de agua de la presa El Llagal, lo que ha provocado inundaciones y que una cantidad no especificada de animales se hayan ahogado.
Hoy equipos pesados de la Barrick Gold, que explota yacimientos de oro en Pueblo Viejo, trabajaban aceleradamente en un intento de controlar los derrumbes que comenzaron en la madrugada de este viernes en el muro principal de la represa.
Las bombas extractoras de aguas han provocado que el río Maguaca que desemboca en el Yuna se haya salido de su caudal, afectando cultivos agrícolas y ahogando animales en las comunidades La Isleta, Bavary, Matías, y Cerrejón y otras.
Esta tarde cientos de campesinos de las comunidades ubicadas en el área de influencia de la presa protestaron lanzando consignas con las que piden mayor seguridad para ellos y sus propiedades.
El vocero de los manifestantes Bernardo García Santos (Neno), dijo que desde que se proyectó la construcción de la presa, previeron sus consecuencias negativas, pero que no le hicieron caso.
Los campesinos se congregaron en las entradas principales de las comunidades el Naranjo, El Llagal, El Rayo, Los Tres Pasos, La Culata, Guardiano, Zambrana Arriba y Abajo, Togin, Las Caobas, Monte Negro, Palo de Cuaba, Las Caobas Hatillo, y Los Cacaos y trataron de entrar a sus propiedades, pero fueron impedidos por militares y miembros de la Defensa Civil.
García Santos explicó que las autoridades dominicanas y los legisladores se dejaron sorprender con el contrato firmado con la Barrick Gold y lamentó que los campesinos que viven en su cercanía son los más afectados, ya que han tenido que vender sus propiedades a precios de “vacas muertas”.
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