Las montañas de Polo están siendo quemadas por desaprensivos para realizar diversos cultivos, sin que las autoridades busquen la manera de evitar esos incendios forestales.
Los incendios forestales son provocados por agricultores dominicanos para diversos cultivos, quienes pagan a haitianos para quemar los terrenos y en la mayoría de los casos las llamas escapan a su control.
Eulalia Cuevas, dirigente comunitaria, explica que los extranjeros del vecino país son usados por sus patronos y acusados por los moradores de Polo, del terrible daño ambiental. Agrega que eso daña los cultivos de café, árboles de cedro y otros bienes alimenticios.
“Los dominicanos que tienen su siembra les pagan a los haitianos, quienes queman todo, y se les pega a ellos que son los más desposeídos; y con eso no los defiendo, pero cuando la gente ve la cosecha, quienes siembran son dominicanos”, explicó la dirigente comunitaria.
El ecosistema en la provincia sureña poco a poco se va perdiendo, por la quema de bosques en las proximidades de donde nacen varios ríos de la provincia Barahona.
Este daño al medio ambiente se hace a la luz de todos, sin que las autoridades tomen carta en el asunto.
El Alcalde de Polo, Andrés Ruiz Peña, conoce la situación; su asistente, Juan Féliz, explica que el cabildo hace lo que está a su alcance, pero alega que no tiene métodos para enfrentarlos. Por ese motivo piden al Ministerio de Ambiente que ayude a solucionar el problema.
“Al igual que este caso (refiriéndose al municipio de Polo), pasa en otras montañas de Barahona, y no hay presencia de las autoridades”, apuntó el Esteban Féliz, regidor del oficialista partido de la Liberación Dominicana (PLD) en el cabildo de Polo.
Algunos agricultores de la zona, reconocen que queman las montañas. “Después que tengo mi trocha hecha, quemo sin ningún problema”, afirmó Rafael Jiménez, quién cultiva en esas proximidades.
Al igual que Jiménez, sus compañeros Elim Cuevas y Juan Vólquez justifican la incineración de los bosques por el estado de pobreza en el que viven.
Agregan que para poder sobrevivir tienen que cultivar la tierra y si no hay espacio, lo hacen con la quema de los bosques en las montañas.
Los residentes en esas zonas se sienten preocupados porque de seguir depredándose el ambiente, el área quedará sin árboles y sin agua.
El último gran incendio forestal en la montaña ocurrió el pasado 14 de abril, en las proximidades de la Estancia de Polo, una quema que se extendió por varias extensiones de terrenos, dañó árboles, exterminó aves y otros animales que habitaban la zona.
Los municipios y comunidades de Barahona más afectados además de Polo, son Cabral, La Cueva, Las Sabanas, Las Auyamas y otros cercanos.
Barahona es una de las principales provincias de la región Suroeste del país, pero a pesar de sus potenciales agrícola y turístico sus recursos naturales sufren las agresiones que le causan algunos de sus munícipes que buscan espacio para producir ante la falta de oportunidades.
Piden más atención de las autoridades.
Esteban Féliz
Regidor de Polo
“El problema de la quema de árboles se produce en varias comunidades de Barahona, no sólo en Polo, pero la presencia de las autoridades es nula, por lo que es poco lo que se puede hacer para corregir la terrible situación”.
Juan Féliz
Asistente del alcalde
“En la Alcaldía tenemos conocimiento de esta situación y hacemos lo que podemos para enfrentarla, pero no contamos con los instrumentos necesarios. Necesitamos la intervención del Ministerio de Medio Ambiente”.
Ley es de débil aplicación
La ley 64-00 de Medio Ambiente y Recursos Naturales no contempla sanciones penales para las personas que cometen daños al ecosistema. Aunque se establecen medidas tendentes a prevenir esos daños, no se producen apresamientos prolongados de los responsables cuando son detectados.
Tampoco el Ministerio Público ha logrado una sentencia ejemplarizadora con el marco jurídico que tiene en sus manos. Frente a los problemas ambientales, varios legisladores han planteado modificar la ley vigente para que se contemple el “Ecocidio” como crimen ecológico que pueda ser castigado.
El ministro de Medio Ambiente, Jaime David Fernández Mirabal, se ha expresado a favor de esa iniciativa, pero hasta ahora no se ha avanzado en las gestiones de aproabción.
No hay comentarios:
Publicar un comentario