Según el ingeniero Víctor Silva, de la empresa Línea Clave El ejecutivo informó que ya fue aprobado por el Poder Ejecutivo el financiamiento de RD$600 millones para convertir a gas natural 15,000 vehículos del transporte público
El Poder Ejecutivo aprobó el financiamiento de RD$600 millones a través del Banco de Reservas para cubrir la instalación de equipos de gas natural a 15,000 vehículos del transporte público, según informó el ingeniero Víctor Silva, ejecutivo de la empresa Línea Clave.
“Ese proyecto implicará un ahorro significativo para los choferes que reducirán su consumo de combustible de RD$1,200 a tan sólo RD$500 y para el gobierno que verá prácticamente eliminada su inversión de RD$700 millones del fondo de bono-gas”, comentó el experto.
Las autoridades aplican a través de la tarjeta Solidaridad el financiamiento de una proporción del consumo de gas licuado de petróleo para aliviar la carga de los choferes del transporte público de bajos ingresos.
De acuerdo con Silva, la iniciativa envuelve además a la Oficina Técnica de Transporte Terrestre (OTTT) en la parte administrativa del personal beneficiario.
Según sus explicaciones, cada vehículo requiere de un equipo de gas natural cuyo costo oscila entre los RD$40,000 y RD$45,000, “el cual será cubierto conjuntamente con la instalación con el fondo habilitado vía el Banco de Reservas”.
Según Silva, las quejas de los consumidores de gas natural será superada en breve tiempo porque el Ministerio de Industria y Comercio desde abril pasado ha autorizado la instalación de 50 nuevas plantas suministradoras de gas natural a nivel nacional.
El crecimiento
En 2007 el expendio de gas natural inició en tan sólo tres industrias, la Zona Franca de San Pedro de Macorís, la fábrica de tarros de exportación de Eduardo Bogaert y la recicladora de desechos sólidos Mordeados Dominicanos (Madosa). Hoy en día la cantidad asciende a 90 industrias que usan el gas natural en sus procesos.
En una segunda etapa el uso del producto fue extendido a los hoteles y otras empresas del turismo, según Silva.
El proyecto de expansión a los vehículos arrancó de manera tímida con cuatro estaciones y 3,000 vehículos. Su uso será popularizado con la integración de los otros 15,000 vehículos del transporte público.
El producto amigable con el medio ambiente ha variado su precio de RD$18.75 a RD$24.75 el galón desde 2007. La variación de los precios se atribuye a que una parte del gas natural se compra en Trinidad y Tobago a precio naymex (preferencial) y otra parte se adquiere a otro valor en los mercados abiertos.
El gerente de la firma Línea Clave dijo que en ese período la cantidad de barcos del producto que llegaban a República Dominicana era de uno cada cuatro meses, “mientras que ahora llega uno cada mes”.
Los retos del momento
Silva refirió que para expandir el consumo de gas natural se requiere mucho esfuerzo porque es una tecnología nueva que implica el aprendizaje de las medidas de seguridad y concienciar a los inversionistas.
Comentó que Industria y Comercio ha desarrollado de manera rápida la elaboración y aprobación de las normas para la instalación y el uso de los equipos, a tal punto que ya han sido acreditados los inversionistas.
“Ahora”, prosiguió Silva, “se precisa que otros inversionistas locales y extranjeros determinen que se trata de un negocio rentable y que reciban el apoyo financiero requerido para la instalación de las terminales”.
También se requiere que se sigan incentivando los talleres y se dé apoyo en la parte de las importaciones y distribución del producto.
“Ese proyecto implicará un ahorro significativo para los choferes que reducirán su consumo de combustible de RD$1,200 a tan sólo RD$500 y para el gobierno que verá prácticamente eliminada su inversión de RD$700 millones del fondo de bono-gas”, comentó el experto.
Las autoridades aplican a través de la tarjeta Solidaridad el financiamiento de una proporción del consumo de gas licuado de petróleo para aliviar la carga de los choferes del transporte público de bajos ingresos.
De acuerdo con Silva, la iniciativa envuelve además a la Oficina Técnica de Transporte Terrestre (OTTT) en la parte administrativa del personal beneficiario.
Según sus explicaciones, cada vehículo requiere de un equipo de gas natural cuyo costo oscila entre los RD$40,000 y RD$45,000, “el cual será cubierto conjuntamente con la instalación con el fondo habilitado vía el Banco de Reservas”.
Según Silva, las quejas de los consumidores de gas natural será superada en breve tiempo porque el Ministerio de Industria y Comercio desde abril pasado ha autorizado la instalación de 50 nuevas plantas suministradoras de gas natural a nivel nacional.
El crecimiento
En 2007 el expendio de gas natural inició en tan sólo tres industrias, la Zona Franca de San Pedro de Macorís, la fábrica de tarros de exportación de Eduardo Bogaert y la recicladora de desechos sólidos Mordeados Dominicanos (Madosa). Hoy en día la cantidad asciende a 90 industrias que usan el gas natural en sus procesos.
En una segunda etapa el uso del producto fue extendido a los hoteles y otras empresas del turismo, según Silva.
El proyecto de expansión a los vehículos arrancó de manera tímida con cuatro estaciones y 3,000 vehículos. Su uso será popularizado con la integración de los otros 15,000 vehículos del transporte público.
El producto amigable con el medio ambiente ha variado su precio de RD$18.75 a RD$24.75 el galón desde 2007. La variación de los precios se atribuye a que una parte del gas natural se compra en Trinidad y Tobago a precio naymex (preferencial) y otra parte se adquiere a otro valor en los mercados abiertos.
El gerente de la firma Línea Clave dijo que en ese período la cantidad de barcos del producto que llegaban a República Dominicana era de uno cada cuatro meses, “mientras que ahora llega uno cada mes”.
Los retos del momento
Silva refirió que para expandir el consumo de gas natural se requiere mucho esfuerzo porque es una tecnología nueva que implica el aprendizaje de las medidas de seguridad y concienciar a los inversionistas.
Comentó que Industria y Comercio ha desarrollado de manera rápida la elaboración y aprobación de las normas para la instalación y el uso de los equipos, a tal punto que ya han sido acreditados los inversionistas.
“Ahora”, prosiguió Silva, “se precisa que otros inversionistas locales y extranjeros determinen que se trata de un negocio rentable y que reciban el apoyo financiero requerido para la instalación de las terminales”.
También se requiere que se sigan incentivando los talleres y se dé apoyo en la parte de las importaciones y distribución del producto.
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