Leones se dan el mejor regalo en aniversario 90 Andy Dirks resalta es el juego más emocionante de su carrera

Triunfo. Luis Manuel Bonetti, presidente del Escogido, besa el trofeo de campeón, junto a José Miguel Bonetti, otro de los máximos ejecutivos del equipo escarlata.                                                                                                      Santo Domingo

Los Leones del Escogido hicieron todo lo humanamente posible para celebrar el 90 aniversario de su fundación levantando el trofeo de campeón. Nunca como anoche había hecho tanta falta “La Tabla Escarlata”, hasta que finalmente la dio Andy Dirks.

“Esto es indescriptible”, Cada campeonato tiene una emoción diferente”, manifestó Dirks, quien impulsó la carrera del triunfo en el noveno al dar un hit con las bases llenas y dos outs al primer pitcheo realizado por el zurdo Edward Paredes.

“El año pasado gané fácil con los Toros, pero lo que he vivido en esta serie no tengo como describirlo”, enfatizó el tercer bate de los escarlatas y quien fue actor de primer orden también en la corona conquistada por los romanenses el pasado año. “En mi carrera nunca había vivido un partido tan emocionante como este”, resaltó Dirks.

La carrera de la victoria la anotó Freddy Guzmán, un jugador de primer orden en el título logrado por los Leones en la estación de 2009- 2010, pero que en esta ocasión perdió su puesto de titular y en la postemprada sólo había agotado dos turnos, uno en el Round Robin y otro en la final.

“Nunca bajé la cabeza. Yo sé la clase de pelotero que soy y me mantuve positivo de que podía ayudar al equipo”, dijo el veterano jardinero. noveno tenía la intención de tocar, porque el infield le estaba jugando alante. Fue entonces, en conteo de 0-1, que le conectó el hit entre primera y segunda a una recta adentro que le sirvió Miguel Batista y, luego, por cuenta propia se lanzó exitosamente al robo de segunda.

Moisés Alou
“Dios mío, gracias por la victoria, gracias por el cuerpo técnico que tenemos, por éstos jugadores de tanto corazón que hay en este equipo.

Si no fuera por ellos no estuviéramos recibiendo el crédito que hoy nos dan”, declaró el gerente general, Moisés Alou.

Indicó que el Altísimo le dio “las fuerzas, la perseverancia y los testículos” para poder sobreponerse a tantos momentos difíciles y a un equipo como el de las Águilas.

“Somos fuertes, demasiado fuertes. Este es el tiempo del Escogido”, proclamó Alou mientras era felicitado por el vicepresidente del conjunto, José Miguel Bonetti, quien resaltó que el Escogido ganó jugando con clase. Alou no adelantó posibles refuerzos e incluso dejó abierta la posibilidad de acudir con su personal, en el entendido de que tiene un equipo A, B y C.

“Si hay algún pelotero que quiera jugar con nosotros que nos llame”, apuntó mientras daba crédito al gran trabajo realizado por el dirigente Ken Oberkfell.

Si de algo estaba seguro el dirigente norteamericano era de que no iban a ver celebrar a las Águilas en el estadio Quisqueya.

“Siempre les dije a los muchachos que aquí no nos iban a ganar”, destacó Oberkfell, quien se unió a Phil Regan (1987-88, 1988-89) como los únicos managers extranjeros en conducir a los Leones al título dos veces.

Luis Manuel BonettiEl presidente de los Leones dedicó el título 14 a los fundadores del club, especialmente a su abuelo Carlos Manuel Bonetti (Pilindo).

“Sentimos una gran satisfacción. Los jugadores se comportaron como campeones, dejaron el pellejo en el terreno”, enfatizó Luis Manuel Bonetti, “Este equipo supo venir de abajo, nunca se dio por vencido”.

“Esta es la mejor manera de celebrar los 90 años del Escogido”, sostuvo. “Vamos a imponer una dinastía”.

Nelson FigueroaEl lanzador Nelson Figueroa, en medio del bullicio, aprovechó la ocasión para elogiar al aguerrido combinado aguilucho.

“Me quitó al gorra ante las Águilas. Cuando nos pusimos 3-0 dije que no iba a ser una serie fácil y así fue. La victoria fue de nosotros porque en la casa somos los mejores”, subrayó Figueroa, quien en la Serie del Caribe lanzará con los Indios de Mayaguez, de Puerto Rico.

Pablo OzunaEsta corona es la primera en la carrera de Pablo Ozuna, quien fue despedido por las Estrellas Orientales, el equipo de toda su vida, y luego parecía el jugador 25 en el roster del Licey, que finalmente lo cede prestado al Escogido, donde revive su carrera.

“Yo sabía que Dios me tenía algo bueno guardado. Tú sabes todo lo que yo he pasado”, manifestó “El Muchacho de la Playa”, quien se reintegró al conjunto luego de haber perdido cuatro partidos debido a que tuvo que viajar a la ciudad de Chicago.