Las autoridades mexicanas presentaron hoy al presunto autor intelectual del atentado contra un casino en Monterrey (norte) que en agosto pasado causó 52 muertos, y lo acusaron también del asesinato de dos jefes policiales y de otros delitos.
Baltazar Saucedo Estrada, alias "El comandante Mataperros", de 48 años, fue presentado ante los periodistas por la Procuraduría de Justicia del estado de Nuevo León, horas después de ser detenido por agentes policiales en esta ciudad, capital del estado.
El portavoz del Consejo de Seguridad de Nuevo León, Jorge Domene, relató que Saucedo fue capturado por miembros policiales a las 13.40 hora local del jueves (19.40 GMT) cuando circulaba en su vehículo por el barrio de San Luis.
El arrestado era jefe para la plaza de Monterrey del cártel de Los Zetas, uno de los más violentos de México.
Junto a él fueron detenidas dos personas más, identificadas como Aurelio Lares Cisneros, de 38 años, alias "El Güero", y Ricardo Ramírez Hernández, alias "el Chaparro" o "El Flaco".
A los arrestados se les decomisó armas y droga, junto con un vehículo.
Saucedo Estrada aceptó en los interrogatorios haber ordenado el incendio del Casino Royale, el pasado 25 de agosto, debido a que los dueños se negaron a pagar una extorsión.
Ese incendio fue provocado por varias personas del cártel de Los Zetas que rociaron varios puntos del casino con gasolina que poco antes habían cargado en una estación de servicio cercana.
Las víctimas fueron empleados y jugadores que se encontraban en ese momento en el local.
El ataque representó un duro golpe para México porque fue el atentado en el que se registró el mayor número de víctimas civiles en un hecho vinculado con el crimen organizado.
En los interrogatorios, Saucedo admitió además su participación, en febrero de 2011, en el asesinato del director del Centro Inteligencia del la Secretaría de Seguridad Pública estatal, Homero Salcido Treviño.
El 27 de junio de ese año también ordenó el asesinato del director de la policía del municipio de Santa Catarina, Germán Pérez Quiroz, quien fue abatido en su propia oficina por pistoleros que irrumpieron en la Secretaría de Seguridad municipal.
Según las autoridades, Saucedo también confesó haber ordenado el secuestro y asesinato de varios policías y agentes de tráfico de las corporaciones municipales de la zona metropolitana.DE EFE
No hay comentarios:
Publicar un comentario