Estiman en más 60 MM de pesos daños por fuego

Precariedades. Los bomberos de Santiago apagaron un gran fuego casi a manos peladas debido a la falta de equipos.                                                                                                                                                           Santiago

Las pérdidas provocadas por el incendio que se originó la noche del viernes y que redujo a cenizas al menos dos establecimientos comerciales del centro histórico de la ciudad, ascienden a más de 60 millones de pesos.

Carlos Lora, presidente de la Asociación de Comerciantes del Centro Histórico de Santiago y propietario de la tienda Tijuana Fashion, donde comenzó el siniestro, lo atribuye a un alto voltaje y dice que las pérdidas que estima en su negocio superan los 40 millones de pesos. “Todas nuestras mercancías se nos quemó y el edificio también, en nuestro almacén teníamos otra buena partida que habíamos sacado de Aduanas, aparte de las que teníamos en ofertas”, dijo Lora al Listín  Diario.

Los bomberos  
El jefe del Cuerpo de Bomberos de Santiago, coronel Ricardo Rosario, dijo que no pueden ofrecer una evaluación acabada sobre el origen del incendio. “Los afectados dicen que es un alto voltaje o un cortocircuito, nosotros no podemos confirmar nada de eso, hasta que nuestro Departamento Técnico concluya las investigaciones”, dijo Rosario.

 En el fuego se pudo observar que los miembros de los Bomberos trabajaban con “las manos peladas”, al menos tres mangueras de tres camiones que de manera activa trataban de apagan el fuego sufrieron serias roturas y lanzaron chorros de agua a los curiosos, que abandonaron despavoridos el lugar en medio de la confusión. Roosario, dijo que es una lógica que los organismos de rescate como el que dirige carecen de equipos en todo el país. No obstante, aclaró que los empresarios amigos han ayudado su gestión facilitándole algunos equipos, pero que a pesar de que están en estado deplorable pudieron dar al traste con la extinción del incendio. Expresó que para poder entrar a una tercera planta de un almacén de una tienda, que resultó afectada ligeramente, fue necesario utilizar seguetas, porque no había forma de penetrar.