La dirección del Hospital Marcelino Vélez Santana informó hoy que Elisa Pérez, de 36 años, quien tenía ocho meses de embarazo y tuvo que ser sometida a una cesárea de emergencia luego de que fuera baleada por su padrastro, y padre de su hija, se encuentra en condiciones estables.
La tragedia ocurrió el pasado martes, en Herrera, cuando Vangelio Guzmán disparó contra ella, su madre, un hermano y luego se suicidó.
La información fue ofrecida por el director médico del hospital, Juan Álvarez, quien dijo que Elisa está bastante recuperada y que hoy los médicos la pusieron a caminar.
Sin embargo, explicó que la criatura continúa en condiciones muy críticas y que su estado ha empeorado desde el punto de vista respiratorio, por lo que su pronóstico sigue siendo reservado.
En la cirugía practicada a Elisa, los médicos tuvieron que extirparle el bazo y un riñón, debido a que presentaba varios impactos de bala en el abdomen.
Mientras que en el día de ayer fueron sepultados los restos de Felícita Pérez, su hijo Wellington Guzmán, de 25 años, y su ex esposo Vangelio Guzmán.
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