La reunión de ayer del Consejo Económico y Social (CES) y el Gobierno culminó sin consenso sobre el marco presupuestario relativo al gasto público para el año 2013. Tras cinco horas de discusión y la presentación de los ejercicios técnicos solicitados ayer por el equipo del Gobierno para lograr ajustar el presupuesto a RD410,000 millones, sin que se implemente una reforma tributaria, como pide el CES, se dio por agotado el proceso.
El ministro de Economía, Planificación y Desarrollo, Juan Temístocles Montás, dijo que esa propuesta no es viable porque el Estado tiene gastos que son inflexibles como los de educación, salud, las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional, y el pago ineludible de RD$74,000 millones por concepto de intereses de deuda, que representa el 3% del Producto Interno Bruto (PIB).
Pese a que en la reunión de ayer, los sectores empresarial, social y sindical presentaron, de manera separada, sus propuestas de presupuesto ajustadas a los RD$410,000 millones propuestos por el CES en los encuentros anteriores, Montás dijo que no se pusieron sobre la mesa propuestas convincentes para que el Gobierno logre funcionar con ese monto, y afirmó que para el año próximo lo racional sería un presupuesto de RD$469,000 millones. Sin embargo, el presidente del Consejo Nacional de la Empresa Privada, Manuel Diez Cabral, aseguró que las tres propuestas presentadas, basadas en ejercicios técnicos, demuestran que es posible lograr el ajuste.
Presupuesto
Asimismo, el presidente del Centro Bonó, Mariano Serrano, dijo que los representantes del CES no fueron escuchados, por lo que consideró que la sociedad y las organizaciones de la sociedad civil tendrán que buscar otro mecanismo para hacer valer su voz.
Asimismo, el presidente del Centro Bonó, Mariano Serrano, dijo que los representantes del CES no fueron escuchados, por lo que consideró que la sociedad y las organizaciones de la sociedad civil tendrán que buscar otro mecanismo para hacer valer su voz.
Roque Féliz, otro de los representantes del Centro Bonó, explicó que la divergencia entre los frentes en discusión estuvo en que el Gobierno alega que el presupuesto de 2012 es válido para considerarlo como base para la elaboración del presupuesto de 2013, mientras el CES plantea que la pieza se diseñe en base al que se ejecutó en 2011, y como el que se aprobó originalmente en 2012, para evitar las distorsiones en la expansión del gasto que hubo este año.
“Estamos pidiendo que se remita con un 23% más del presupuesto de 2011, pero el Gobierno considera que eso no es pertinente”, señaló el dirigente social.
El dirigente destacó que con la actual estructura tributaria, hay una evasión significativa que debe ser resuelta antes que se proponga aumentar la carga impositiva. “Esto no quiere decir que no estamos dispuestos a discutir un pacto fiscal de mediano y largo plazo comprometido con la Estrategia Nacional de Desarrollo”, agregó Féliz. De su lado, el vicepresidente ejecutivo de la Confederación Nacional de Unidad Sindical (CNUS), Rafael -Pepe- Abreu, dijo que el sector sindical no apoya el aumento del Impuesto a la Transferencia de Bienes Industrializados y Servicios (ITBIS) y la grabación de los pequeños ahorros y la regalía pascual, sino que la carga debe ser impuesta a los sectores que más la pueden soportar.
“Si todos los sectores se niegan a ser tocados con nuevos impuestos y es necesario una reforma, entonces la carga recaerá en la clase media extendida del país, que es la que no tiene representación, como ha sucedido en las 14 reformas que se han realizado en el país”, sostuvo el dirigente sindical. Abreu coincidió con los demás representantes del CES en que sus propuestas no fueron escuchadas, y señaló que solo espera que los legisladores asuman el papel representativo que les corresponde y eviten que se cargue el consumo y la clase trabajadora.
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