domingo, 2 de diciembre de 2012

Ingeniera herida perdona a su verdugo y pide a Dios tener compasión con él


Momento cuando dos egentes de la Policía conducen esposado a José Manuel Vidal Feliz (Memín), acusado de haber disparado a la ingeniera Francina Hungría.                                                                                                        , Florida
Pido a Dios mucha compasión por ellos'
LA INGENIERA HUNGRÍA PIDE A LAS AUTORIDADES QUE EVITEN TANTAS ARMAS EN LAS CALLES                                                                                                      “Le pido a papá Dios mucha compasión por ellos, y a la justicia dominicana que se encargue para que esas cosas no sigan ocurriendo en mi país”, fue la primera expresión que salió de la ingeniera Francina Hungría, al enterarse del arresto por parte de la Policía de la persona responsable del disparo en la cara que le hizo perder su ojo derecho y que le mantiene aún a la espera de poder recuperar la visión del izquierdo.
  Dijo que lo bueno de eso es que ahora mismo no puede ver el rostro de la persona que le disparó porque todavía no logra sacar de su mente  su rostro, y el arma apuntándola.
 Francina fue entrevistada para Listín Diario en su habitación del Jackson Memorial Hospital donde se en u entra ingresada, tras ser trasladada al centro por la Fundación Nacional de Desarrollo Integral (Fundi).
Le acompañan su madre Iluminada y su padre Frank Hungria, así como n equipo de la fundación encabezada por su presidente Félix Bautista y el doctor Arístides Bautista.
Agrega que es muy duro porque hasta hace una semana ella decía que Republica Domnicana era el mejor país del mundo, y que sigue amando su país, pero que hoy  ella le pregunta a su papá cómo sale a la calle y sentirse segura.
Dice que sabe que volver a recobrar la confianza es un proceso que va a tardar mucho, porque es muy difícil cuando en el país hay tantas personas con armas de fuego.
“Yo creo que en mi país no debe haber tantas personas armadas, haciendo daño”. Los padres de Francina exhortaron a la sociedad dominicana a que que por favor se sigan haciendo esas oraciones que es lo que mas necesitan en estos momentos para alcanzar la salud total y que Francina pueda rehacer su vida.
Madre
A su madre Iluminada Hernández, la noticia le arrancó un suspiro. Dijo que lo importante es que las dos justicias, la Divina y la humana se encarguen de ellos, porque no quisiera que otras familias pasen por la angustia que están viviendo..
Su padre, el ingeniero Frank Hungría, dijo que sabia que la policía estaba trabajando y en ningún momento dudó de que sería atrapado.
 “Independientemente  de que cristianamente lo perdonemos, cualquiera que produce un daño se hace reo de la  justicia, tanto humana como de Dios”, agregó.
“Lo que más quisiéramos es que personas como ellos no puedan seguir haciendo ese daño, no que lo maten, pero que no sigan en la calle haciendo ese mismo daño”, dijo.
Afirmó que la familia no busca  venganza,  y que lo que más importante es la salud de hija. Agradeció el apoyo que están recibiendo de la Fundi “y de todos los sectores que se han identificado con nuestra causa”. abandonada
 A la ingeniera la despojaron de una jeepeta Mitsubishi Outlander, gris, placa G221336, la cual fue dejada abandonada en la avenida Gustavo Mejía Ricart. arma utilizada
La Policía informó que le ocupó una pistola Tanfoglio, calibre 9 milímetros, número AB36227, con la cual fue herida la ingeniera. Esta arma había sido robada en el 2010 en el Ensanche Ozama. 
Policía arrestó al hombre que disparó a la ingeniera
La Policía apresó a tres hombres, incluyendo al presunto autor de disparle en un ojo a la ingeniera Francia Hungría Hernández, para despojarla de su vehículo y escapar tras cometer otro robo en el sector Piantini, de la Capital.
Los detenidos fueron identificados como José Manuel Vidal Feliz (Memín) quien, según el cuerpo de orden público disparó a Hungría Hernández,  José Miguel Mora Acosta, que conducía el carro Camry, rojo, en el que se desplazaban, y Melvin Pérez (Bululo), señalado como la persona que alquiló el arma, que luego le fue retornada.
Está prófugo José Manuel Arias Mejía (Bacanay), a quien la Policía exhortó a entregarse por la vía que entienda conveniente, advirtiéndole que quiere evitar enfrentamientos.
Los pormenores del caso fueron ofrecidos por el portavoz de la Policía, general Máximo Báez Aybar, en compañía del general Ney Aldrin Bautista Almonte, jefe de la Dirección Central de Investigaciones Criminales (Dicrim), y el coronel Manuel Jesús Feliz, encargado del Departamento de Investigación de Homidicios.
Bacanay, conforme archivos de la institución, figura con dos registros, uno por robo en el año 2002, y otro por homicidio en el 2005 en La Romana, en cuya acción fue asesinado un vigilante.Vidal Feliz admitió a los investigadores haber hecho el disparo, indicando que su intención original fue romper el cristal y quitar el seguro al vehículo para escapar del lugar.
BANDA PRIMERO ‘UBICÓ’ A SEÑORA Y CHOFER
El arrestado dijo que primero fueron al sector Piantini, luego de haber ubicado, cerca de una institución bancaria, a una señora de 68 años, y a su chófer, de 40, a quienes dieron seguimiento. 
Narró que éstos fueron seguidos hasta una plaza comercial, la observaron pagar con una papeleta de 2 mil pesos, siguiéndola hasta Piantini, en la calle Manuel de Jesús Troncoso, donde la despojaron de su cartera, que luego tuvieron que abandonar al ser perseguidos por una multitud. Declaró que tras tomar el control del vehículo en el que viajaba la ingeniera, se marcharon de la escena y luego lo abandonaron en la calle Gustavo Mejía Ricart, donde abordaron un taxista, a punta de pistola, quien logró lanzarse de su vehículo, próximo a la avenida Jhon F. Kennedy, llevándose las llaves, aprovechando una luz roja de semáforo.
Ante esta situación, narró Vidal Féliz, abordaron una guagua del transporte público y se fueron al sector de Maquiteria, en Villa Duarte, donde fue ubicado y apresado. La Policía le habría ocupado, durante un allanamiento en su residencia de Maquiteria, la ropa que vestía el día cuando perpetró el hecho.

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