La Policía española detuvo a 35 personas y se incautó de más de 11 toneladas de hachís, en lo que consideró una de las mayores operaciones contra el tráfico de esta droga en la península.
La red, que operaba desde el centro de España, importaba el hachís de Marruecos y lo distribuía por España y Europa, según informó hoy la Policía.
Entre los detenidos, 31 son de nacionalidad marroquí, tres españoles y un belga.
Traían la droga a España desde Marruecos oculta en depósitos de gasolina de camiones, que llegaban hasta dos naves industriales que el grupo tenía en la provincia de Toledo (centro).
En ellas, abrían los depósitos de los camiones y extraían la droga que venía en paquetes, y luego tras soldar los tanques volvían a enviar los camiones a Marruecos, donde se cargaban otra vez con hachís.
Una vez cortada la droga, la escondían en mercancía que se transportaba legalmente a diferentes puntos de España y a países como Holanda, Francia, Bélgica e Inglaterra.
En uno de los camiones, explicó la Policía, se cargaron unos 1.700 kilos de hachís y 65 de marihuana ocultos entre toneladas de zanahorias frescas destinadas a Francia y Holanda.
En otro, conducido por el ciudadano belga arrestado, se escondieron 8.500 kilos de droga en ropa de una primera marca internacional rumbo a Inglaterra.
La operación se desarrolló desde marzo en diferentes fases, durante las cuales se fue interceptando la droga y arrestando a diferentes miembros de la red. DE EFE
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