La décimo cuarta Feria Internacional del Libro Santo Domingo 2011 fue dedicada al Vaticano como país invitado y en la ocasión Benedicto XVI manifestó en un mensaje enviado al país, su agradecimiento al entonces presidente Leonel Fernández. Al mismo tiempo, ese año se celebraban los 500 años de la constitución de las diócesis de Santo Domingo y La Vega.
La fiesta de la cultura dominicana se consolidó con la dedicatoria de igual modo al obispo emérito monseñor Francisco Arnaiz y al padre José Luis Sáez, dos de las plumas más fructíferas de la literatura cristiana en República Dominicana.
Esa versión fue inaugurada por el entonces presidente Leonel Fernández, su esposa Margarita Cedeño de Fernández; el entonces vicepresidente Rafael Alburquerque; el exministro de Cultura, José Rafael Lantigua; el cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez; el cardenal Gianfranco Ravasi, presidente del Consejo de Cultura y Delegado de Su Santidad Benedicto XVI; así como el nuncio Jozef Wesolowski; monseñor Francisco José Arnaiz; el padre José Luis Sáez; el embajador ante la Santa Sede, Víctor Grimaldi, y Alejandro Arvelo, director de la Feria del Libro.
Mensaje del Papa
El Papa expresó a través de un vídeo-mensaje su agradecimiento al presidente dominicano, Leonel Fernández, y a los demás responsables de la iniciativa de dedicar al Vaticano la “gran fiesta de la cultura”. El Papa dijo en la ocasión estar seguro de que el pueblo dominicano sabrá sacar provecho a los “significativos maestros” de la producción literaria de la Iglesia católica en las obras que se conocerán en la feria.
El Papa expresó a través de un vídeo-mensaje su agradecimiento al presidente dominicano, Leonel Fernández, y a los demás responsables de la iniciativa de dedicar al Vaticano la “gran fiesta de la cultura”. El Papa dijo en la ocasión estar seguro de que el pueblo dominicano sabrá sacar provecho a los “significativos maestros” de la producción literaria de la Iglesia católica en las obras que se conocerán en la feria.
La Santa Sede anunció en el marco de la feria que donaría 15,000 libros para ser distribuidos en bibliotecas públicas dominicanas. Benedicto XVI manifestó que creía que la feria del libro de Santo Domingo daría la oportunidad de apreciar “una significativa muestra de la producción literaria de la Iglesia Católica y su gran aportación a la cultura y al pueblo dominicano”.
El Papa, en un vídeo-mensaje enviado a la feria, con el Vaticano como país invitado, recordó las palabras de Pío XII para quien “el oficio de un buen libro es educar a una comprensión más profunda de las cosas, a pensar y reflexionar”. Explicó que Dios “ha dispuesto que la única y eterna Palabra divina se expresase, por inspiración del Espíritu Santo, en palabras humanas que pudieran ser plasmadas”.
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