SANTO DOMINGO, República Dominicana.-El sacerdote Wojciech Gil (Alberto) abandonó el país con doble identidad lo que ha dificultado a las autoridades identificar su nombre real para realizar el sometimiento a la justicia por violación sexual contra decenas de niños en Juncalito, Santiago.
El sacerdote Wojciech Gil (Alberto), de nacionalidad polaca, acusado de violar sexualmente a decenas de niños en Juncalito, provincia de Santiago, salió del territorio dominicano y hasta el momento ha rehusado volver para hacer frente a las acusaciones.
La Fiscalía de Santiago se encuentra a la espera de una certificación por parte de la Dirección General de Migración sobre la salida y no retorno del sacerdote, quien viajó con otra documentación.
Para identificar exactamente el nombre del sacerdote, las autoridades investigativas están identificando el día específico en que habría viajado en compañía del grupo de jóvenes, porque no aparece registrado su nombre “Wojciech Gil” en ese vuelo.
Según informaciones obtenidas por Acento.com.do, el Ministerio Público agiliza el proceso de identificación del sacerdote polaco para solicitar la declaración de estado de rebeldía del imputado en los tribunales dominicanos.
La falsificación de identidad supondría un nuevo cargo contra el sacerdote católico, para fines de sometimiento a la justicia.
Los denunciantes
Según la Fiscalía de Santiago, de los menores de edad que fueron alegadamente violados por el sacerdote, solamente tres víctimas han sido identificadas, debido a que los familiares de otros menores de edad que fueron abusados no han querido presentarse ante las autoridades.
Según informó la Procuraduría, miembros de la Fiscalía de Santiago acudieron a la comunidad de Juncalito el pasado jueves 20 de junio, a concienciar y orientar tanto familiares como la comunidad puedan entender el delito del que se trata y el por qué de interponer la denuncia.
Las víctimas de violación del sacerdote no han podido ser interrogadas porque los menores se encontraban tomando exámenes de la escuela y hasta el momento sólo uno de los menores ha sido interrogado.
El cura, que tenía a su “cuidado” a 180 niños, les prometía viajes gratis a Polonia si se portaban “bien”.
Las familias presentaron su querella en el Tribunal de Niños, Niñas y Adolescentes y en la Unidad de Violencia de Género de la Fiscalía de la provincia de Santiago.FUENTE ACENTO.COM.DO
No hay comentarios:
Publicar un comentario