Es de todos conocidos los beneficios y necesidad de beber suficiente agua, sin embargo el mayor consumo se realiza vía agua embotellada, lo cual no es del todo saludable si se reutilizan o rellenan los envases plásticos de forma reiterada, sugieren varios estudios.
Reutilizar los envases plásticos para beber agua de manera repetida puede provocar que diversas sustancias químicas se liberen por las fisuras que se generan con su continuo uso, según un estudio de la Universidad Católica Australiana.
Riesgos para la salud
Beber agua embotellada o reutilizar los envases plásticos puede implicar el consumo de diversas sustancias como desinfectantes, químicos plásticos, restos de productos farmacológicos y otras sustancias que se desprenden de los mismos, lo que representa un riesgo para la salud:
1. De acuerdo con un estudio publicado en la revista PLoS ONE, los diversos tipos de plásticos contienen productos químicos disruptores endócrinos, lo cual se relaciona con un mayor riesgo de desarrollar cáncer de mama, ovario, útero, tiroides y próstata.
2. Un estudio publicado en la revista Consumer muestra la presencia residuos de ftalatos en botellas de PET, uno de los plásticos más usados en la industria del agua embotellada. Los ftalatos afectar negativamente a la salud cuando se encuentran a partir de ciertas cantidades, ya que, entre otras cosas, pueden actuar como disruptores endocrinos, provocando un efecto estrogénico, es decir, comportándose como hormonas femeninas.
3. La congelación de las botellas de plástico puede liberar dioxinas cancerígenas en el agua, según una investigación de la Johns Hopkins Bloomberg School of Public Health.
4. Cuando abrimos una botella de agua, su interior puede contaminarse con distintos tipos de microorganismos, como bacterias y hongos, que pueden proceder de distintas fuentes, como nuestra boca (si bebemos directamente a través del envase de plástico) o el ambiente, según la universidad australiana.
5. Dejar las botellas de agua expuestas a sol o a altas temperaturas pueden generar una mayor concentración de antimonio, químico empleado como catalizador para fabricar botellas de PET que, en elevadas cantidades, puede ser tóxico y se ha relacionado con un aumento en el riesgo cardiovascular, además de que también se considera un agente cancerígeno.
Además de los anteriores riesgos, de acuerdo con The Official Journal of the American Society for Reproductive Medicine, otro de los compuestos químicos, el Bisfenol A (BPA) de las botellas de plástico se ha vinculado con anormalidades reproductivas, como una mayor afectación en el semen, además de ser agente para el desarrollo de diabetes y obesidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario