
El enorme árbol se arrancó de raíz y cayó sobre las dos casas, ubicadas en la cañada de la calle Tony Mota Ricart, una de las vías que enlaza a los barrios Savica y Camboya, en la parte alta de esta ciudad.
La casa destruida es propiedad de la señora Altagracia Emilia Peña, mientras que la que resultó parcialmente destruida es del señor Rubén Darío Peña.
Darío Peña dijo que el árbol se fue a tierra a eso de las 2:00 de la madrugada mientras las dos familias dormían tranquilamente, en momentos que caía una leve llovizna y soplaba una suave brisa.
"Estamos vivos por la misericordia de Dios, por lo que ahora necesitamos que alguna autoridad del gobierno, municipal o políticos en particular acuda en nuestro auxilio para reconstruir y reparar nuestras casas", dijeron Emilia y Darío Peña.
Vecinos dijeron que desde hace tiempo aconsejaban a las dos familias a que derramaran y luego secaran con sustancias químicas el árbol de Gina, ya que constituía un peligro para sus vidas por estar prácticamente encima de las dos viviendas.
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