domingo, 9 de agosto de 2015

Procesos internos de los partidos generan gran proselitismo El país está envuelto en un intenso activismo político-electoral, lejos de la JCE hacer proclama

 SANTO DOMINGO. El país ya está envuelto en un intenso y extemporáneo activismo político-electoral, conducido por los partidos políticos y precandidatos a cargos presidenciales, congresuales y municipales, cinco meses antes de que la Junta Central Electoral (JCE) lance la proclama dejando abierta la campaña electoral hacia las elecciones nacionales de mayo del 2016.
Según la Ley, y de acuerdo al cronograma presentado por la JCE (disponible en su página web), es en el mes de enero cuando oficialmente se declara abierta la campaña electoral, pero la fuerza del proselitismo que llevan a cabo los políticos en todo el territorio nacional ha hecho adelantar, en la práctica, esa fecha.
En los barrios y sectores de la capital y la provincia Santo Domingo, igual que en las ciudades y campos del interior, la campaña política no da tregua, la cual se intensifica los fines de semana con actividades incalculables de un inusitado número de precandidatos que persiguen obtener la nominación de sus respectivas organizaciones políticas.
Estruendosos aparatos de música peinan las calles de los barrios más populares, promocionando a innumerables precandidatos a puestos congresuales y municipales, todos presentando el supuesto “padrinazgo” de los hasta ahora definidos candidatos presidenciales, Luis Abinader por el Partido Revolucionario Moderno; Danilo Medina, del Partido de la liberación Dominicana (pendiente de ser oficializado), Federico Antún Batlle, por el Partido Reformista Social Cristiano, Guillermo Moreno, de Alianza País, y otros.
Igual como ocurre en cada período similar, la falta de regulación y ordenamiento de estas actividades ya comenzaron a generar caos e inconvenientes en el libre tránsito vehicular y peatonal, agregado al alto ruido que genera daños auditivos en la ciudadanía.
Cada día transcurrido la “pista” se torna más caliente y congestionada de activismo político, que se manifiesta de manera simultánea en las calles con marchas, caravanas y colocación de afiches y otras promociones visuales, así como en los medios de comunicación audiovisuales.

SEGUNDA ETAPA SERÁ AUN MAS INTENSA
Esta etapa en que el país se ve arropado por una celeridad de las actividades de los políticos, se hará aun más intensa cuando los partidos concluyan los procesos internos que desarrollan, tras lo cual habrá de definirse todas las candidaturas a las senadurías, diputaciones, alcaldías y regidurías a nivel nacional.
Para entonces se espera un incremento del llamado laborantismo político, esta vez con menos competidores en escena, aunque sí un mayor ímpetu, continuismo y constancia de los ya oficialmente candidatos en la carrera hacia el 2016.
En esta segunda y crucial etapa, que inicia con la conclusión de los procesos internos de los partidos, entran al ruedo con mucha más fuerza, firmeza e impuso de candidaturas presidenciales, dándole mayor auge e intensidad a la campaña electoral.

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