Acompañado por dirigentes y simpatizantes de la formación, el aspirante se presentó ante la Junta Municipal Electoral donde afirmó que, aunque se ha producido "un fraude en todo el país, aquí, en el municipio de Santo Domingo Oeste, es donde se han dado los mayores abusos".
En este sentido, el candidato aseguró haber encontrado en la basura, cerca de la sede de la Junta Municipal, un buen número de boletas con su correspondiente sello y firma, donde estaba marcada la opción por el candidato presidencial del PRM, Luis Abinader.
"Han utilizado incluso fuerzas militares para intimidar a la gente y sacar a los delegados en el momento de terminar el escrutinio", afirmó, "han cometido fraude de todos los tipos, como compra masiva de votos; ha habido diferencias entre la cantidad de concurrentes y de boletas", denunció.
"Aquí no ha habido unas verdaderas elecciones, aquí ha habido una violación de la voluntad popular y una violación de la Ley Electoral en todos los sentidos, por eso estamos pidiendo que nos cuenten voto a voto y, si no, que vayamos a otras elecciones aquí", dijo.
Mientras, en Santo Domingo Este, decenas de técnicos que trabajaron en los comicios, se congregaron frente a la Junta Municipal para reclamar el pago de los 5,000 pesos que la Junta Central Electoral (JCE) se había comprometido a remunerar a estos trabajadores.
Según explicaron, cuando se han presentado a cobrar, les han indicado que solo percibirían la mitad, 2,500 pesos, por el trabajo realizado el domingo, y señalaron su intención de permaneces ahí apostados hasta que reciban el importe completo.
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