Moradores del residencial Guajimía II, en la prolongación 27 de febrero, Santo Domingo Oeste, se quejan por el ruido y las emisiones de monóxido de carbono que esparcen dos plantas eléctricas que mantiene encendida una empresa productora de cerveza radicada en el sector.
Los residentes de ese sector expresaron que no pueden dormir debido al ruido que provocan las plantas y por el picor que les general en el cuerpo el polvillo que emanan las mismas.
Consideran que es un abuso de esa empresa, porque cuando construyeron ese residencial, el Gobierno negoció con ellos para que dejaran las operaciones en ese local.
"Ellos prendieron la planta en la madrugada del miércoles y no la han apagado. Tenemos que cerrar puertas y ventanas y ponerles fundas plásticas para aguantar el mal olor', dijo una de las vecinas.
Aseguran que han llamado al 911 para que vayan en su auxilio, pero las plantas continúan prendidas.
Pidieron la intervención de las autoridades de Medio Ambiente para que vengan a investigar la situación y evitar que la gente se enferme por el monóxido de carbono y el polvillo que emanan de las dos plantas que no paran su ruido.
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