El 8 de agosto, día de su cumpleaños, el joven actor dominicano Andy Iturbides confesó a unos amigos que se sentía en baja. Siempre fue la manera de hacerles saber a sus allegados que la depresión estaba haciendo estragos en su vida.
En muchas ocasiones, cuenta Manuel Enrique Aguiló, uno de sus amigos, acompañaron a Andy a salir de la amarga situación, que, en ocasiones, le embarga.
“Nunca nos dijo qué le provoca esa situación, pero cuando nos dice que está en baja, nosotros, unos seis amigos, salimos a divertirnos con él y lo acompañamos, para que él se sintiera mejor”, revela Aguiló al conversar para LISTÍN DIARIO.
Andy es asistente ejecutivo en un laboratorio de medicina y ejerce la actuación como una de sus principales metas.
“Siempre nos dice que su sueño es convertirse en actor famoso, tanto en el país como en e exterior”, cuenta Aguiló, quien junto a otros amigos se ha sumado a la búsqueda de Andy desde el día de su desaparición, el pasado jueves 19 de agosto.
En el 2010 Andy Iturbides entró a estudiar en la Academia de Formación Artística, AFA, de Amaury Sánchez.
Es en esa academia que Manuel Enrique conoce a Andy, y junto a otros compañeros forjaron una estrecha amistad que aún mantienen a pesar de haber concluido los estudios en la academia.
“Cuando estudiábamos en AFA todos los días nos juntábamos a tocar guitarra, a cantar, a reírnos hasta entrada la madrugada y como vivimos tantos momentos hermosos, la amistad se fue fortaleciendo- agrega- cuando concluimos los estudios en la academia, algunos se fueron a vivir fuera del país, otros nos quedamos, incluyendo Andy y continuamos la amistad”, refiere.
“Siendo el mayor de los seis, esa diferencia de edad no se notaba porque Andy tiene el alma joven, es muy extrovertido, alegre, afable y muy gracioso, siempre se la pasa haciendo chistes, pero también es una persona muy creyente de Dios”, lo define Aguiló.
Cuando Andy compitió en el concurso del programa televisivo “Más Roberto” (canal 11), Aguiló recuerda que todos le apoyaron y celebraron con él el haber triunfado en el certamen.
Según revela Aguiló, supo de la depresión de su amigo cuando éste concluyó el concurso de “Más Roberto”.
“Él llevaba su trabajo, la universidad y ante de la final del concurso le dio un desgaste físico. Por conversaciones que tuve con él, sé que buscó ayuda y le diagnosticaron una depresión”, relata.
Giselle Aybar es otra de sus amigas de AFA y lo define como un “alma de luz” entre ellos: “Es el amigo que te ayuda con tus problemas. Cuando estudiaba actuación me ayudó mucho con las prácticas, porque soy super tímida, siempre me aconsejó y ayudó en todo lo que necesitaba”.
Giselle, al igual que muchos de sus amigos, desde que se enteró de su desaparición, se sumó a la búsqueda. Familiares y cercanos estuvieron el pasado domingo recorriendo lugares para dar con su paradero.
Patricia Moll, Estefany Liriano, Karina Larruri, Waddys Jáquez, Genesi Brito, Paula Ferry, Paloma Rodriguez, Joan Delgado, María Castillo, Laura García Godoy, Javier Grullón y otros forman parte del equipo que busca al actor Andy Iturbides.
+ En la actuación
Andy ha participado en los cortometrajes: “Cordones necios” “Ausente” y “La reina soy yo”. Ha actuado en las películas “Vamos de robo” y “Freddy La Película”.
En el teatro participó en la obra teatral “La Causa” y en la televisión en el concurso “Mi gran actuación” en el programa “Más Roberto” y en “Pamela todo un show”.
+ Ruta
Desde que se supo de la desaparición de Andy, el jueves 19 de este mes de agosto, sus familiares y amigos iniciaron la búsqueda, dado el diagnóstico de depresión del actor. Se recuerda que ese día, como siempre, el joven fue a su trabajo y salió a las 9:30 de la mañana, dejó su vehículo y su celular en su residencia, en Gazcue, donde vive con su mamá y nunca más se ha sabido de él.Manuel Enrique y Juan Diego, dos de sus grandes amigos, iniciaron una búsqueda por cuenta propia. Visitaron todos los lugares que saben, Andy frecuenta, entre ellos la Zona Colonial, el Malecón, y los alrededores por donde residen. Ante la llamada de personas que decían haberlo visto, acudían a esos puntos, como el 12 de Haina, donde peinaron la zona, incluyendo destacamento, y hasta preguntaron al personal de algunas cabañas para ver si se había quedado a dormir en alguna.
Las horas pasaban y ni rastro de Andy, y ni voluntad policial para encontrarlo, pues como han dicho sus familiares, con el diagnóstico médico de depresión del joven, no había que esperar las 24 horas, y aun así, dicen, las autoridades se quedaron de “brazos cruzados”.
El viernes continuaron la búsqueda. Esta vez a lugares a los que nunca imaginaron Andy podía ir, como El Almirante, Invivienda, la Duarte y otros puntos que fueron recorridos por por los referidos amigos, y muchos otros que se han unido a la búsqueda, también perdiéndose en el camino y exponiéndose al peligro de entrar en lugares donde la delincuencia está a la orden del día, ¿y la Policía? ¡Muy bien, gracias!
El sábado y el domingo no han sido diferentes. Fue un fin de semana para seguir buscando a Andy.
Estos dos días el grupo que se unió a la búsqueda era más amplio, y a muchos les extraña que la Policía no les haya hecho una sola pregunta a sus amigos para tener alguna pista.
El caso es que, mientras avanzan las horas, los días… crece la incertidumbre y la angustia entre los familiares, amigos y hasta de la sociedad dominicana por la desaparición del actor.
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