En conmemoración del día internacional contra la corrupción, este 9 de diciembre, el titular de la Procuraduría Especializada de Persecución de la Corrupción Administrativa (Pepca), Wilson Camacho, utilizó Twitter para difundir su mensaje de lucha contra este "cáncer nacional".
“Es justo reiterar que en este país ya no hay intocables y que nadie está por encima de la ley. La corrupción no tiene lugar donde esconderse en República Dominicana”, expresó el magistrado en la red social.
Camacho resaltó que la pobreza de un país se relaciona directamente con sus niveles de corrupción, y citó a la experta en corrupción política estadounidense, Susan Rose-Ackerman.
“Un país es más pobre en general si lo niveles de corrupción son elevados. En este caso, puede verse atrapado en un círculo vicioso en el que la corrupción alimenta más corrupción y disuade la inversión de negocios legítimos”. Susan Rose-Ackerman”, se lee en el tuit.
El titular del Pepca, quien ha estado al frente de los últimos grandes casos de corrupción del país, destacó el “número descomunal de víctimas” que deja un acto de corrupción, afectando incluso a “generaciones enteras”.
“Generaciones son afectadas por esta lacra social. Son innumerables los actos de corrupción que puede promover una sola muestra de #impunidad. Es mala la corrupción y peor la impunidad. Frenemos la corrupción!”, manifestó.
Hizo un llamado a la población dominicana a “rechazar la corrupción y a los corruptos a una sola voz”, así como generar un régimen de consecuencias que se aplique a todas las personas por igual.
“La sociedad civil, el sector académico, el público y los jóvenes, en la lucha contra la corrupción”, añadió.
El magistrado agregó que la corrupción funciona como un “impuesto irregular sobre la inversión” y genera distorsiones en la economía y sociedad de un país.
“Altos niveles de corrupción se asocian a bajos niveles de inversión y crecimiento. La corrupción reduce la efectividad de las políticas industriales e impulsa a las #empresas a actuar en el sector no oficial infringiendo las leyes fiscales”, expresó.
Camacho también afirmó que estas acciones delictivas promueven “una concepción patrimonialista del poder y una cultura de privilegios”.
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