La diputada por la provincia de Santiago por el Partido Revolucionario Moderno (PRM), Soraya Suárez, denunció que ha sido víctima de dos atentados.
La legisladora reveló que ha sufrido al menos dos incidentes y que no los había denunciado porque se “negaba a creer que le habían hecho algo a propósito”.
El primero aconteció luego de que la legisladora concluyera una actividad que duró más de tres horas, en un barrio de Santiago, cuando le cortaron los frenos a su vehículo.
De ese día, se vio en la necesidad de dejar su vehículo estacionado en una calle, debido a lo estrecho que era acceder al barrio, indicando que los fines de semana para ella es una costumbre manejar. “Estaba en mi ciudad donde pienso que todo el mundo me quiere”, dijo.Sin embargo, cuando se disponía a salir hacia la avenida para marcharse a su hogar, junto a unos compañeros “no tenía frenos”, alegadamente.
“Entro a mi guagua, le doy reversa, salgo de la calle y cuando voy a tomar una pendiente para salir a la avenida del barrio donde estoy digo: ‘No tengo frenos’”, relató Suárez al ser entrevistada en el programa "El Sol de la mañana”, que se transmite por la emisora Zol 106.5FM.
“Andaba con una amiga y ella me dice que ‘ponga la emergencia’ y gracias a Dios pude detener la guagua en marcha”, agregó.
Describió que los amigos con quienes andaba buscaron un mecánico cerca de la zona y conjuntamente con personal de RD Vial, se percataron de que “el tanque del líquido de frenos estaba absolutamente vacío”.
Luego, al hurgar por debajo del vehículo se dieron cuenta de que uno de los conductos estaba cortado. “Me luce que te lo cortaron”, fue lo que le dijeron, explicó, puntualizando que no lo creyó hasta el segundo día que llevó el vehículo a una clínica de frenos y le aseguraron que “efectivamente, les fueron cortados”.
Dijo que no hizo caso hasta el segundo incidente cuando se dirigía con destino a Santo Domingo.
Mientras se desplazaba por La Vega, su yipeta empezó a emitir un extraño sonido y resultó ser, supuestamente, que “habían mezclado gasolina con azúcar en el tanque del combustible”.
Esta conclusión la sacó a raíz de unas pruebas a las que sometió a su medio de transporte.
“No lo había hecho (denuncia) porque yo me negaba a creer que me habían hecho algo a propósito”, fue lo que dijo Suárez.
Indicó que guardó discreción y no comentó ni reaccionó, porque “inmediatamente lo quieren ligar a otras cosas y decir que uno está inventando cosas, y yo no tengo necesidad de eso”.
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