SANTIAGO.–Con una mayor afluencia de público, se realizó esta mañana el mercado binacional entre ciudadanos haitianos y dominicanos en la provincia Dajabón, en la zona norte y que estuvo cerrado por más de tres meses, luego que el Gobierno Dominicano dispuso el cierre total de sus pasos fronterizos con el vecino país como protesta por la construcción del canal canal en Juana Méndez y que pretende derivar agua del río Masacre, cuyo nacimiento está localizado en una montaña de Loma de Cabrera.
Desde tempranas horas de este lunes, hombres, mujeres y niños cruzaron el portón de Aduanas de Haití que comunica a Juana Méndez con Dajabón, para abastecerse de productos alimenticios y de otra índole en el Mercado Fronterizo localizado en las proximidades de Aduanas Dominicanas y el informal que se genera en las vías circundantes.
La vigilancia militar y policial por parte del Gobierno Dominicano ha sido reforzada varias veces por los incidentes que han provocado grupos de civiles haitianos, quienes reclaman mayor cantidad de visados y rebaja del mismo por parte de las autoridades diplomáticas criollas y la eliminación completa del chequeo biométrico.
Empero, el presidente Luis Abinader ha declarado reiteradamente, que el chequeo biométrico por parte de las autoridades de seguridad en frontera domínico-haitiana, es innegociable.
ELOGIA REINICIO MERCADO
De su lado, el alcalde municipal, Santiago Riverón elogió el reinicio del mercado binacional, ya que a su entender favorece a miles de familias haitianas, pero al mismo tiempo a toda la provincia de Dajabón y a los productores agrícolas del Cibao Central, la Línea Noroeste y a las empresas nacionales.
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Dijo que ese mercado debe permanecer siempre abierto.
Señaló que de parte de las autoridades municipales, hay una gran disponibilidad para que el mercado no vuelva a cerrarse.
Cada lunes y viernes, en el mercado fronterizo que se realiza en Dajabón, son comercializados miles de quintales de pollos vivos y procesados, así como productos de la canasta diaria entre los que están el arroz, aceite comestible, habichuelas, ajo, cebolla, ajíes, plátanos, frutas y vegetales.
Asimismo, artículos para el hogar y la higiene personal.
Decenas de motoconchistas y moto-taxis transportan las mercancías hacia el vecino país, además de los denominados “poteas”, que son personas que ingresan a Dajabón a comprar productos de personas que les pagan por ese servicio.
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