Nueva York, Estados Unidos.- El Embajador dominicano ante la Organización Mundial del Comercio –OMC– y Presidente de la Junta de Comercio y Desarrollo de la UNCTAD, Luis Manuel Piantini, advirtió que los precios de los alimentos están aumentando hacia los mismos niveles que provocaron hambre, inanición y disturbios políticos en 2008, y que los costos del petróleo han vuelto a dispararse para situarse por encima de los 100 dólares el barril, lo que plantea de nuevo el riesgo de que se produzca una segunda recesión y un potencial desastre en la inmensa mayoría de los países en desarrollo importadores de petróleo.
El Embajador Piantini se refirió al tema ayer, en las Naciones Unidas, al dictar el discurso inaugural en la reunión de primavera del Consejo Económico y Social –ECOSOC–, junto al presidente del ECOSOC, Embajador Lazarous Kapambwe, de Zambia. En el encuentro estuvieron presentes los representantes de las instituciones de Bretón Woods, la Organización Mundial del Comercio y la UNCTAD.
El diplomático dominicano, al hablar en representación de los Estados Miembros de la UNCTAD, llamó la atención de la comunidad internacional en relación a la situación que enfrentan algunos de los Países Menos Adelantados –PMA–, los cuales podrían encontrarse actualmente al borde de una crisis alimentaria. “Los tres principales productos de exportación de los PMA representan tres cuartas partes de sus exportaciones totales y en ocho países esa proporción es superior al 95%. Al mismo tiempo, la producción y las exportaciones de productos agrícolas de los PMA se han estancado. En consecuencia, la expansión de las economías de los PMA ha venido acompañada de un aumento simultáneo de la factura de las importaciones de alimentos, las cuales se incrementaron en 167% en solo seis años, pasando de más de 9.000 millones de dólares en 2002 a 24.000 millones en 2008”.
“Esperamos que el primer paso en este proceso será tomado en la cuarta conferencia de los PMA. Desde que se estableció la clasificación de Países Menos Adelantados, hace cuarenta años, menos de cinco países han emigrado de esta fatídica lista. Esta realidad constituye una vergüenza y demuestra la escasa eficacia de las políticas y programas aplicados por los organismos internacionales. A pocas millas de la economía más poderosa del planeta se encuentra uno de los países más pobres del mundo, Haití, desvastado por los fenómenos naturales, la mano del hombre y por erróneas políticas comerciales, financieras y económicas impuestas desde el exterior. Este país debe de recibir con urgencia la ayuda comprometida por la comunidad internacional por eso en mi calidad de Presidente de la Junta de Comercio de la UNCTAD, hago un llamado a los Estados Miembros a que se comprometan constructivamente a este fin y tengo la esperanza de que la XIII UNCTAD, que se llevará a cabo en Doha (Qatar) en abril de 2012, se convierta en una plataforma útil para articular algunas de estas ideas en previsión de la alianza para el desarrollo posterior a 2015”.
En este contexto, el Embajador dominicano presentó las propuestas que ha analizado la UNCTAD a fin de lograr dar respuestas a estas problemáticas y asegurar un desarrollo sostenible. En el ámbito del comercio internacional, indicó que sigue siendo el principal motor del crecimiento y el desarrollo mundial; por lo que es fundamental que el sistema multilateral de comercio evolucione de manera que responda a las necesidades y prioridades de los países en desarrollo, y un paso importante en esa dirección será la conclusión de la Ronda de Doha, con el cumplimiento de todas sus promesas de desarrollo. Asimismo, señaló que ésta podría verse en peligro por la mayor demanda de las economías desarrolladas para que los países emergentes abrieran más sus mercados de bienes no agrícolas y por la fuerte apreciación de la tasa de cambios en algunos de ellos que estaban aumentando rápidamente sus déficits comerciales.
“Es esencial mantener el acceso a los mercados internacionales y resistir al proteccionismo. Deben encararse eficazmente los obstáculos a que se enfrentan los países en desarrollo para expandir el comercio, en particular fomentando las capacidades productivas y la competitividad, mejorando el acceso a la financiación del comercio, reduciendo aún más las barreras arancelarias y no arancelarias que afectan a sus exportaciones y eliminando los obstáculos técnicos y no técnicos”.
En cuanto a la inversión pública planteó la importancia en que los gobiernos impulsen alianzas público-privadas (APP). De igual manera, estableció que “una gobernanza institucional reforzada, sumada a una política fiscal preactiva, son instrumentos fundamentales para el desarrollo de las capacidades productivas, la reducción acelerada de la pobreza y el logro de los Objetivos de Desarrollo del Milenio”.
Luis Manuel Piantini, recordó que los esfuerzos a nivel nacional deben complementarse con una evolución de las formas de concebir el desarrollo, y sus repercusiones a nivel mundial, teniendo presente la necesidad de un enfoque inclusivo de desarrollo y la importancia de abordar áreas fundamentales del sistema económico internacional. Al tiempo en que destacó que las Naciones Unidas puede lograr resultados uniformes en la gobernanza económica mundial y que ésta será la tarea más importante de cara a un 2015 próspero para toda la humanidad.
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