SANTO DOMINGO. Volvieron los nubarrones en el cielo del Partido Revolucionario Dominicano (PRD) tras una guerra epistolar entre el presidente de esa organización, Miguel Vargas, y el expresidente Hipólito Mejía, lo que, según abogados perredeístas, apunta a otra guerra en los tribunales.
"El 19 de julio e'pa fuera que va, porque él terminó su período y yo también, yo tengo mi carta ya renunciando el 19, porque yo tengo tres cargos, Comisión Política, Comisión Ejecutivo y Consultivo, bueno no soy nada ni nadie es nada", dijo Mejía, al referirse a Vargas.
Negó rotundamente que haya hecho un preacuerdo con Vargas para apoyarle como candidato presidencial y distribuirse otras candidaturas.
"Yo accedí a ver a Miguel después de dos años sin verlo, para, como yo, dije romper el hielo, en una reunión de romper el hielo ¿Qué preacuerdo o qué acuerdo usted puede llegar?", puntualizó.
"Yo no involucro a mi familia en eso, no es verdad. 'Ah que es conveniente que la familia del presidente y su hija Carolina participen en una estructura para beneficio mío' sí, eso es otra cosa, pero nosotros no negociamos, mi familia no se mete en eso, ni yo tampoco, yo no estoy en política para hacer negocios", indicó.
Consideró que las aspiraciones de Vargas a la candidatura presidencial son legítimas, pero él no puede entregársela, sino que tiene que ganársela, porque en el PRD no se le regala nada a nadie si no se lo gana, tras afirmar que Vargas ha hecho cosas por las que será muy difícil que se la gane".
Mejía afirmó que hay un padrón para hacer una convención, y hay suficientes fondos para montar ese evento, al tiempo que advirtió que la próxima semana entregará la nómina del partido.
Argumentó que no negocia nada, y la convención del PRD se puede realizar con los padrones del 2008, 2010 y 2012, y que las elecciones se ganan con la gente que va a votar y quien obtenga más votos, no con los padrones.
Guido niega fuera enlace
El dirigente perredeísta Guido Gómez Mazara negó que haya sido interlocutor entre los expresidentes Leonel Fernández e Hipólito Mejía para concretizar un acuerdo al que habrían llegado, pero que luego Fernández le habría "sacado la alfombra", según las afirmaciones hechas por Vargas en un documento.
"De que eso fuese cierto, cosa que no es verdad, yo soy el leonelista más extraño, porque Leonel, cuando se presentó en el 96, yo estaba con Peña; cuando Leonel le cedió la candidatura a Danilo en 2000 y en el 2004, cuando Leonel fue de candidato, yo estaba con Hipólito", expuso.
Dijo que sus hechos hablan por él en las campañas, y recordó que como consultor jurídico fue quien sometió el caso del Programa Mínimo de Empleo (Peme) del primer gobierno de Fernández.
Puello y contradicciones
El mediador entre Mejía y Vargas manifestó que escuchó de "viva voz" de ambos líderes las versiones del encuentro que sostuvieron en la residencia de Lomas Lindas del exministro de las Fuerzas Armadas, y que en esas versiones se contradijeron.
Relató que Jorge Mera comentó que había presión en el sector de Mejía para responder que "aquello que no era un acuerdo, era un diálogo, era un protocolo, pero realmente acuerdo como tal, firme, que se pudiera firmar, hasta ese momento no lo teníamos en la mano".
"No hay ninguna duda de que en las condiciones que cada cual hablaba, el otro respondía cuál era su posición, el punto clave obviamente que giraba alrededor de la candidatura de Miguel Vargas para el 2016", expresó.
Explicó que los dos primos hermanos (Orlando Jorge Mera y Eduardo Jorge Prats) se retrotrajeron a la reunión de Lomas Lindas, y propusieron los puntos que Vargas había hablado con Mejía en esa reunión, en la que no hubo testigos.
Soto: "La base del acuerdo era el apoyo a Miguel"
SD. El anfitrión del controversial encuentro de Miguel Vargas e Hipólito Mejía, José Miguel Soto Jiménez, declaró a Diario Libre que lo que Vargas le explicó es que "lo único que él no negociaba, no era la candidatura presidencial como un hecho, sino a sus aspiraciones a la Presidencia de la República, y fíjate los dos bajo el mismo discurso: la institucionalidad".
Sostuvo que se logró ese encuentro, y Mejía accedió con esa condición de Vargas, y acordó la fecha de la reunión al visitarlo en el Partido V República.
"El fundamento del acuerdo proyectado era el apoyo del Presidente Mejía al Presidente Vargas, bajo la premisa de que el Presidente Mejía, y por eso se dio la reunión, había dicho en innumerables ocasiones que él no aspiraría a cargos electivos dentro del partido ni fuera del partido", indicó.
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