La participación política de la mujer como alcaldesa y regidora se ha establecido sobre el 30% de los cargos disponibles en las elecciones locales de 2010 y 2016 en República Dominicana, un avance de cinco puntos porcentuales desde los comicios de 2002 y 2006.
Hay también un crecimiento interesante en el número de mujeres que han decidido presentar candidaturas en las pasadas cuatro elecciones municipales, con un pico del 39.63% de las aspiraciones asumidas en el proceso electoral de mayo pasado.
La participación de las mujeres en los municipios es mayor que en el Congreso Nacional, donde las féminas han logrado en las recién concluidas elecciones una representación del 24.7% de la matrícula en el parlamento, que ya de por sí significaba una variación positiva desde el 18.91% que tiene el actual Congreso dominicano.
Datos de la Oficina Nacional de Estadística (ONE) y de la Junta Central Electoral explican el comportamiento de la mujer como candidata a las posiciones municipales, y sus elecciones en cada una de las últimas cuatro asambleas electorales.
En el año 2002, por ejemplo, las mujeres ganaron 25.21% de los cargos como síndicos o regidores de los gobiernos locales, un período de elecciones en el que estuvieron disponibles 912 posiciones municipales. En el proceso electoral de 2006 esa participación se redujo al 24.68% de las 1,114 posiciones y en las elecciones de 2010 encontró su pico: 30.21% de los 1,304 puestos.
Para esta publicación no han sido consideradas las posiciones de vicealcalde porque la legislación electoral establece que las propuestas a los ayuntamientos estarán atadas a la equidad en el género, de modo que cuando la alcaldía es dirigida por un hombre la segunda posición en importancia debe ser ocupada por una mujer, y viceversa.
La intención de ocupar posiciones municipales ha mantenido una variación en positivo desde 2002 cuando las candidaturas de mujeres se situaron en el 34.48% de las 6,179 propuestas presentadas para los comicios. En la asamblea electoral del año 2006 la marca fue del 33.46% de las 6,138 candidaturas presentadas y en las del año 2010 los datos hablan del 37,44% de las 5,629 aspiraciones.
Para los comicios de 2016 las candidaturas que presentaron las mujeres fueron del 39.63% de las 8,341 candidaturas presentadas. La participación de la mujer no ha mostrado el mismo crecimiento o la misma tendencia de variación positiva en los puestos ministeriales del gobierno, con una reducida y estancada participación de no más de cuatro mujeres en cada uno de los gobiernos en los pasados 20 años y cinco gestiones de gobierno.
La mujer dominicana tuvo que esperar hasta 2016 para ver hechas realidad la presentación de candidaturas a nivel presidencial con los nombres de Minou Tavárez y de Soraya Aquino. Nunca en la historia dominicana una mujer había sido postulada por un partido político para el principal cargo de dirección en República Dominicana, y solo en 2016 se registraron dos casos.
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LOS AVANCES LOGRADOS DESDE EL AÑO 1942
LOS AVANCES LOGRADOS DESDE EL AÑO 1942
El derecho al voto de la mujer dominicana fue cristalizado en 1942 cuando los destinos del país eran dirigidos por el dictador Rafael Leonidas Trujillo, que de acuerdo a analistas e historiadores utilizó ese recurso como promoción en el extranjero de su administración.
Como anécdota histórica interesante se cuenta que en Nueva Jersey, en 1776, fue donde por primera vez se autorizó el voto de las mujeres, aunque de manera accidental, porque en esa ocasión se permitía el “voto de las personas”, abolida esa legislación en 1807 tan pronto como se dieron cuenta “del error”.
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