El Parque Mirador Sur es un valioso recurso natural de la capital, pero a pesar de su gran belleza, refleja cierto abandono en algunos de los diez kilómetros que lo conforman, donde la maleza parece formar parte de su vegetación.
Las fuentes decorativas de donde una vez emanaban olas artificiales, hoy son estanques de agua sucia que sirven como criadero de mosquitos, insectos y todo tipo de alimañas.
Otra de las cosas que afean el área comprendida entre los kilómetros siete y ocho, es la gran cantidad de basura, que es recogida, pero que se acumula.
Asimismo, algunas de las plazoletas o gazebos, ubicadas en el interior del parque, están totalmente abandonadas, y a las que están en uso les faltan pintura y mantenimiento.
Dos avenidas bordean el parque: la Mirador del Sur, conocida también como “Avenida de la Salud”, y Anacaona. La primera es transitada por vehículos, pero solo a ciertas horas del día, pues desde las primeras horas del amanecer, las autoridades municipales la cierran al tránsito de autos a favor de las personas que utilizan este espacio para ejercicio y actividades saludables, de donde recibe ese nombre.
En este contexto, este importante espacio ecológico ha dejado de ser un lugar seguro, pese a los esfuerzos del Ayuntamiento del Distrito Nacional, quien lo administra, de reforzar la seguridad con la presencia de policías municipales y la policía ciudadana.
El último intento para enfrentar la cantidad de atracos a los usuarios del parque, fue en septiembre pasado con la designación, por parte de Interior y Policía, de un destacamento móvil en el punto siete y un sistema de patrullaje fortalecido en motores y a caballo.
Aunque con ciertas limitaciones, el Mirador del Sur ofrece a los visitantes áreas educativas, recreativas y comerciales. Hay tres áreas infantiles, que incluyen el parque Las Canquiñas, heladería, discoteca y dos restaurantes, de los que sólo opera uno. Hay un tren que recorre varios kilómetros del parque, que exhibe cientos de palomas, un pequeño lago artificial y el inconfundible farallón que lo delimita.
Es el primer parque ecológico de Santo Domingo
El Mirador Sur es el primer parque ecológico de Santo Domingo. Fue inaugurado en 1970 por el extinto presidente Joaquín Balaguer, quien decidió nombrarlo así por ser un mirador natural hacia el mar Caribe.
Un informe reciente, titulado “Parque Mirador Sur, Flora y Fauna”, del Centro de Información Ambiental del ADN, el Grupo Ecologista Tinglar y la Agencia de Cooperación Internacional del Japón, indica que el parque ha pasado por varios períodos difíciles, cuando las instalaciones se deterioran por falta de fondos, siendo los problemas más crónicos el vertido de desechos y la falta de seguridad. Entre los beneficios ambientales del parque está la fauna y flora silvestre, que incluye muchas especies nativas y endémicas.
Planes de ADN
En el Centro de Información Ambiental, oficina que opera dentro del parque, se informó que las autoridades tienen diversos planes para mejorar las condiciones del lugar, como la sustitución de árboles invasores por plantas nativas y endémicas.
Entre las especies sustituidas están acacia amarrilla, chacha, javilla extranjera, jina extranjera, leuceana, melina, nin, pino Australia y otros. Ayer se observó que algunos tramos de la Avenida de la Salud están siendo reparados.
El Centro desarrolla varios programas de educación dentro y fuera del parque a fin de vincular a la población con el estilo de vida más acorde con el medio ambiente. También imparte cursos de flora y fauna, aseo, reciclaje, arbolado urbano y otros.
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