viernes, 31 de diciembre de 2010

Incienso, más que aroma

Cuando entramos por primera vez en una casa, nuestros sentidos se agudizan, no solo prestamos atención a lo que vemos (una buena decoración, orden o limpieza), sino también nuestro olfato puede captar la agradable aroma que haya en el ambiente, lo que contribuye a que la estancia sea más acogedora.


Por lo tanto, debemos dar al hogar su propio y original aroma, encontrando los que nos llenen de buenas vibraciones. Una buena manera de aromatizar y llenar el hogar de buena energía, es a través del incienso.

Desde la antigüedad el incienso ha sido utilizado para atraer las buenas energías, purificar y perfumar los ambientes; y hoy en día, sigue siendo una forma popular para impregnar en los espaciosun delicioso aroma.

Muchas de las esencias tradicionales, como la salvia, cedro, sándalo siguen siendo populares, pero se les han unido otras que han calado en el gusto de las personas, como el jazmín, el arrayán y la canela.

El incienso, se ha convertido en un clásico aromatizador en las viviendas, representa una opción igual de eficaz, incluso más duradera, que los ambientadores tradicionales.

En la actualidad, los inciensos están compuestos por resinas vegetales aromáticas a las que se les añaden diversas esencias. Se fabrican en forma de varita con centro de bambú, granulado, en forma de cono y en espiral, siendo la primera la más popular.

Para quemar

No coloques el quemador de incienso sobre mesas plásticas o de madera. Se pueden quemar.

Cuando quemes incienso en forma de conos, espirales o barritas, hazlo en recipientes resistentes al calor.

Si quemas incienso granulado, asegúrate de hacerlo en un recipiente hueco, resistente al calor.

Ten en cuenta el tamaño de la habitación y el número de personas presentes. No querrás ahogarlos con una densa nube de humo.Nunca dejes el incienso prendido, ya que tiene el mismo principio que un carbón.

Producto

Otros beneficios

Un aire fresco y perfumado tiene efectos beneficiosos sobre la salud. Hay que tener presente que el perfume no debe servir para ocultar los malos olores, cuya eliminación se reducirá a una ventilación adecuada.

El incienso, en sus distintas presentaciones, tienen un alto poder desinfectante. Si es en forma de aceite, basta con verter unas gotas en una lámpara para aromas, en un difusor de barro o en el humidificador del radiador.

Además, el uso del incienso, si es de buena calidad, purifica el ambiente y nos permite ahuyentar los insectos, dejando una rica sensación de frescura.

Cada olor, una función

Cada uno de los aromas de los inciensos posee propiedades particulares. Por ejemplo, según la corriente del Feng Shui, la canela atrae la buena suerte y la fortuna; el coco purifica las energías; la gardenia alivia las decepciones amorosas y el jazmín promueve la sensualidad y despeja la mente.

Dicen que la lavanda crea ambientes de paz y relajación, revitaliza y purifica, la rosa depura ambientes cargados, la mirra protege contra malas energías y la vainilla relaja y propicia ambientes cálidos y llenos de buenas vibras.

No hay comentarios: