Los habitantes de Mapioro y Macandela, en Pedernales, pese a la falta de apoyo gubernamental, no escatiman esfuerzos para alcanzar sus objetivos.
Hombres, mujeres y niños, armados con picos, azadones, machetes y rastrillos, trabajan en la rehabilitación de un camino vecinal con la finalidad de poder transportar y vender sus cosechas.
Durante un recorrido por estas comunidades, dedicadas a la producción de cítricos, leche, miel, guandules, café, cacao, maíz y otros rubros, se pudo observar el respeto que estos trabajadores sienten por su labor, con el fin de llevar sus productos a quienes viven en la ciudad. Según estos productores, nunca han recibido apoyo del gobierno, lo que les obliga a depender exclusivamente de su propio esfuerzo.
A pesar del cansancio, los agricultores se sienten motivados por la satisfacción de su trabajo, viendo en cada esfuerzo una oportunidad de dar valor a su sudor y a su producción. Sin embargo, hacen un llamado al gobierno para que tome en cuenta la situación de las comunidades de Mapioro y Macandela, pertenecientes al distrito de Juancho, en la provincia de Pedernales.
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La mayoría de los residentes de estas localidades forman parte de la Asociación Campesina Manos de Jesús, que espera que el gobierno apruebe la explotación de caliche, autorizada por las empresas encargadas de la construcción del Aeropuerto y la Autovía Turística Enriquillo-Pedernales.
Los productores Cristóbal Feliz, presidente de la asociación, junto a Marta Feliz, Manuel Moreta Feliz y Flerida Moreta, destacaron que, además de ser una zona productiva, el área posee un gran potencial para el ecoturismo de montaña.
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