La presencia de Franmil Reyes se ha hecho sentir tanto en la alineación como en el camerino de los Leones del Escogido.
Y no ha impactado solo por sus 6¥5 de estatura y 270 libras de peso, sino por su poder al bate y buena influencia que resulta.
“Franmil tiene una presencia enorme para nosotros aquí en todos los aspectos”, resalta José Gómez, el gerente general del Escogido Baseball Club.
“Es un tipo con mucha energía, alegre, que mantiene a todo el mundo contento. Es muy dócil a pesar de su figura, siempre tiene una palabra de aliento y, obviamente, es tremendo pelotero, con mucho poder”, enfatiza.
“Es un excelente compañero de equipo y mantiene a los muchachos motivados, aparte de que es un gran bateador. Un tipo primera clase”, subraya el capitán Wilkin Castillo.
En el foco rojo
Previo al Sorteo de Novatos del 2014, Gómez viajó a Iowa, donde opera la sucursal Clasé A de los Padres de San Diego, con la expresa misión de evaluar a “La Mole”, como es apodado, a los fines de ficharlo.
Su reporte fue positivo y en efecto así ocurrió. Reyes fue la cuarta selección de los Leones, que previamente habían tomado al outfielder Rafael Bautista, al inicialista Nelly Rodríguez y al intermedista Claudio Bautista.
“Él no tiene restricción y se lo está gozando. Quiere vivir la experiencia que tuvo Franchy (Cordero) de jugar aquí el año entero porque se dio cuenta que le benefició mucho. Eso le falta en su carrera y entiende que este es el año para hacerlo antes de establecerse como todo el mundo espera”, apunta Gómez.
Cordero y Franmil fueron firmados el mismo día por la organización de San Diego y juntos dieron su primer viaje a Estados Unidos.
“Franchy es una de las razones por las que yo estoy aquí. Esta liga le ayudó mucho y sé que será de gran provecho para mí también”, declara el oriundo de Palenque, quien este año debutó en el Gran Circo con los Padres.
Sumó 32 cuadrangulares entre la Triple A y béisbol de Grandes Ligas
“Él era un pelotero que hacía muchos swings a pitcheos fuera de la zona y cuando llegó a Estados unidos en el 2018 se vio la diferencia del Franchy que yo conocía. Ahora es más consistente en su zona de strike”, destaca.
Cordero, a quien considera parte de la familia y su líder, fue el Jugador Más Valioso y Novato del Año de la liga en 2017 tras batear .323-5-25, así como cinco triples y 30 anotadas.
Reyes señala que esta es una liga donde se ven muchos pitcheos rompientes en cualquier conteo, lo cual, entiende, es muy similar a las Mayores en ese sentido, donde debutó el 14 de mayo de este año.
Primer año en GL
“La Mole” tuvo average de .280, con 16 cuadrangulares y 31 remolques en 87 partidos con los Padres y 261 turnos. Su proporción de ponches (80) y base por bolas recibidas (24) no fue buena.
Antes de ser llamado de AAA, donde militaba con el conjunto El Paso Chihuahua, compilaba .344-16-52 en 58 cotejos y 210 turnos. Es decir que sumó 32 cuadrangulares este año, sumando la actuación que tuvo en ambos circuitos.
Aunque breve, pues solo participó en cinco encuentros, su debut con los Leones se produjo en realidad en la estación 2014-2015 y fue excelente.
Su promedio fue de .438 (de 16-7). Al año siguiente, solo agotó tres turnos en dos cotejos, pero ahora registra .304-2-3 en sus primeros siete choques.
“El equipo luce diferente con él en la alineación, a pesar de que todavía no está en su debida forma”, puntualiza el veterano Diory Hernández. “Tiene demasiado talento. Sí Dios le da salud será otro grande del béisbol dominicano”.
La dimensión que alcanzan los batazos de Reyes han llamado la atención en Estados Unidos y también asombra aquí. Su primero en este circuito lo dio descolgado a un lanzamiento fuera de la zona el pasado día dos contra las Águilas en el Estadio Cibao.
Mendy López, el genial narrador del conjunto cibaeño, dijo que si pudo sacar la bola por el jardín izquierdo en esas circunstancias, que no sería cuando su bate haga contacto con un buen pitcheo.
“La gente de Puerto Plata debe estar preparada”.
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