Luego de alrededor de una hora en el aire, un avión de Delta Airlines que cubría el vuelo 324 con destino a la ciudad de Atlanta, Estados Unidos, se vio precisado a retornar a esa terminal, tras una pasajera presentar síntomas de haber sufrido un infarto.
La señora Sandra Mejía, de unos 45 años de edad, sufrió fuertes dolores en el pecho en pleno vuelo, situación que obligó al piloto de la aeronave con otros más de l00 pasajeros, a regresar al aeropuerto.
Médicos y paramédicos de servicio en el aeropuerto se desplazaron al lugar a la espera del avión para prestarle asistencia.
La dama fue sacada de la aeronave en una silla de ruedas, y fue llevada al dispensario de Salud Pública, lugar donde fue evaluada de inmediato por los médicos y enfermeras de servicio y su traslado a un centro asistencial de Santo Domingo, según los informes.
Según se explicó, el avión había salido de la terminal aeroportuaria a las 4:10 minutos hacia la ciudad de Atlanta. El piloto de la aeronave notificó la situación a la Torre de Control, alertando al personal médico y paramédico, quienes recibieron la viajera Sandra Mejía.
Después que la pasajera fuera bajada del avión, la aeronave volvió a despegar 22 minutos después hacia su destino final, la ciudad de Atlanta, Estados Unidos.
Algunos miembros de seguridad de la empresa Longport, trataron de obstaculizar el trabajo de los periodistas que cubren la fuente de Las Américas, lo que provocó repudio de los comunicadores.
Los periodistas advirtieron a los empleados de la empresa de seguridad privada, que tienen facilidad de circulación sin ningún obstáculo por las diferentes aéreas, provistos del carnet correspondiente.FUENTE NUEVO DIARIO
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