Dominicana cómplice de cirujano huyó a RD y es perseguida para extradición

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NUEVA YORK._ La dominicana Alma Melo, acusada de complicidad en el caso de su compatriota, el cirujano estético Héctor Cabral, huyó a la República Dominicana donde se encuentra prófuga de las autoridades neoyorquinas que la buscan intensamente para extraditarla y procesarla en la Corte Suprema del Estado. Melo enfrenta acusaciones similares a las de Cabral y huyó a su país natal, luego de que se activara una orden de arresto en su contra. Entre los cargos están esquema para defraudar en primer grado y conspiración en quinto grado.

Melo fue el contacto de Cabral en Nueva York después que operara a varias mujeres que dejó desfiguradas y a la que sus clientas debían llamar para arreglar los acuerdos en el tratamiento post operatorio que se hacía en apartamentos de Queens y el Alto Manhattan.

Melo, también reclutó algunas de las víctimas y recibía paga por ese trabajo. Estuvo al lado de Cabral desde agosto del 2008 hasta octubre del 2009 y estafaron a más de 10 personas. El total de las operadas, la mayoría se hizo liposucción con modificaciones en varios órganos del cuerpo como nalgas y nariz.

Salones de bellezas y spas fueron usados como “consultorios” por los acusados. Cabral ejerció ilegalmente la medicina en 10 oportunidades, entre el 2006 y el 2009. Si es declarado culpable el cirujano dominicano enfrentaría hasta 20 años en la cárcel.

Luego de negarle la fianza, la juez Laura Ward, se la concedió, pero le negó la devolución del pasaporte. El portavoz de prensa de la Procuraduría General del Estado, Fernando Aquino, dijo desconocer si se ha procesado un pedido de extradición contra Melo, pero regularmente, cuando un prófugo o prófuga de la justicia norteamericana, es arrestado en otro país, ese es el procedimiento usado para traerlos ante los tribunales de justicia.

Cabral y Melo, fueron instruidos de los cargos el lunes de esta semana en la Corte Suprema del Estado. El fiscal general estatal Eric Schneiderman, dijo que Cabral, atrajo a pacientes desprevenidos con precios de ganga por procedimientos médicos muy complejos, anteponiendo su propia codicia por encima de la salud y la seguridad de sus víctimas.