Las elecciones internas del oficialista Partido de la Liberación Dominicana (PLD) tomaron un nuevo matiz con el anuncio de que se acogió la figura de la segunda vuelta, en caso de que ninguno de los precandidatos obtenga al menos el 50% de los votos en la convención, prevista para el próximo 26 de junio.
Con el anuncio, las estrategias de campaña de los precandidatos deberá redefinirse, especialmente la del favorito Danilo Medina, quien, por su alejamiento del poder, podría enfrentar un bloque de cara a una segunda vuelta. Para evitarlo, deberá realizar acuerdos con aspirantes que con el sistema de mayoría simple tenían muy poco valor.
La entrada a competencia de la primera dama de la República, Margarita Cedeño de Fernández, también agrega emoción a la carrera, que definirá sus protagonistas este domingo, fecha antes de la cual se espera que sea descartada la posibilidad de que el presidente, Leonel Fernández, se presente como candidato a la reelección.
Las especulaciones en torno a un posible trasfondo de la inclusión de la segunda vuelta giran especialmente sobre un posible favorecimiento a Cedeño, quien recientemente inició abiertamente su proselitismo y requeriría más tiempo, los 15 días que da la segunda vuelta servirían de aliciente, en caso de logre superar a compañeros como José Tomás Pérez y Francisco Domingo Brito, dos de los que se perfilan en la retaguardia de Medina en las encuestas.
También abre la posibilidad de que Medina, un estratega consumado, busque un acuerdo que cierre posibilidades a cualquie otro aspirante: ofrecer la candidatura vicepresidencial a Cedeño de Fernández, quien, de aceptar, endosaría a la candidatura del ex secretario de la presidencia la imagen de cercanía al presidente de la República, hasta ahora su principal hándicap.
De anunciarse un acuerdo como este, es probable que las demás candidaturas descarten sus posibilidades de triunfo.
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