Santo Domingo.- Hoy se cumplen 92 años que el huracán San Zenón, con vientos superiores a 240 kilómetros por horas azotó la República Dominicana, destruyendo la ciudad de Santo Domingo y ocasionado la muerte de más de 4,000 personas; desplazandose posteriormente por San Cristóbal, Peravia, Azua, San Juan y Elías Piña.
Fue el 3 de septiembre del año 1930 cuando el poderoso huracán ocasionó aguaceros intensos, tormentas eléctricas, con penetraciones del mar desde las primeras horas de la mañana y debido a que gran parte de las viviendas eran de tablas fueron derribadas.
Según los registros históricos del ingeniero Antonio Cocco Quezada, la ciudad quedó destruida, con centenares de pérdidas de vidas humanas, a pesar de que el Servicio de Meteorología advirtió que se acercaba un ciclón.
El sistema se había formado a unos 150 kilómetros al este de las Antillas Menores entre los días 29 y 30 de agosto de 1930 y de inmediato comenzó a desplazarse hacia el oeste/noreste en dirección hacia la región del Caribe.
Fue el día primero de septiembre cuando en Santo Domingo se recibió un cable de prensa procedente de Washington, Estados Unidos informando que un disturbio de considerable intensidad había sido localizado al noreste de la isla de Martinica, Antillas Menores.
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Los días 31 de agosto y primero de septiembre el huracán se movió al sur de Puerto Rico y el día 2 se comenzaron a sentir sus primeros efectos de oleaje anormal y ocasionales ráfagas de viento.
Para esa época, la ciudad de Santo Domingo contaba con unos 70,000 habitantes. En algunos barrios y sectores residenciales que fueron destruidos, el huracán dejó un balance (según trabajo del Ing. Juan Ulises Garcia Bonnelly) de 20,000 heridos, 4,000 muertos y 25 millones de pesos en pérdidas, (Cambiaso 4000 muertos, 50 millones en pérdidas y 15,000 heridos) catástrofe producida en unas pocas horas de azote a la ciudad por el huracán.
Según autoridades sanitarias meses después, se elevaban a 8,000 muertos y 20,000 heridos. Los muertos fueron enterrados en la Plaza de la Colombina.