Reducen los envíos de basura a Duquesa

Los montones de basura vuelven a incrementarse en el Distrito y Santo Domingo.

Los ayuntamientos del Distrito Nacional y de los municipios de la provincia Santo Domingo han reducido el envío de basura a Duquesa desde el fin de semana, dejando acumular enormes montones de desechos. El promedio normal de viajes de los camiones compactadores al vertedero oscila entre 396 y 400 viajes diarios. Sin embargo, el domingo sólo entraron 99 camiones y ayer 290. Esa situación ha provocado que las demarcaciones estén llenas de basura.

No obstante, el vertedero de Duquesa está operando con normalidad, a pesar de los aguaceros de los últimos días. “Estamos con la boca abierta esperando que nos traigan desechos sólidos”, explicó la administración del vertedero. En los barrios se escucha el clamor de la gente: “Nos ahoga la basura”. En algunos sectores del municipio Santo Domingo Este el impacto ha sido menor porque el alcalde implementó un programa de colocación de contenedores. Sin embargo, hay otros de esa demarcación que están llenos de basura, como Catanga, Los Mina, Alma Rosa, Almirante, San Isidro y Los Tres Brazos.

Con la basura arriba

En el residencial Radiante Amanecer sus moradores no saben qué hacer con los desperdicios porque los camiones no están pasando a recoger la basura. Shira Abreu demandó del alcalde Juan de los Santos que tome acción para resolver el problema, porque ellos aún se conforman con que se retome la programación anterior de pasar a recogerla miércoles y sábados.

Los residentes tienen que sacar la basura en vehículos y depositarla en la calle Rafael Tomás Fernández Domínguez, donde hay un enorme vertedero improvisado, del que emana una gran contaminación, que alimenta la propagación de ratas y moscas.  Otros contratan haitianos para que saquen la basura en carreta. Unos cargan con ella a cuestas y otros en la capota de los vehículos.

“Estamos cansados de durar tanto tiempo acumulando basura y luego tener que salir para arrojarla en la calle, a sabiendas del daño al medio ambiente”. Moradores ven con impotencia cómo los camiones pasan por su entorno y no se paran a recogerla. Sabana Perdida y Cristo Rey también continúan repletos de desechos sólidos, lo que preocupa a los munícipes, que se ven compelidos a quemarlos para deshacerse de ellos.