Todos los años las ballenas jorobadas visitan la Bahía de Samaná, convirtiéndose en un espectáculo único para dominicanos y extranjeros que llegan a esta parte del país con el propósito de verlas haciendo sus peripecias en las aguas del mar Caribe.
Es una experiencia emocionante para cualquier mortal, pero es más excitante cuando las ballenas se pueden obervar desde un ángulo perfecto, y en un ambiente confortable dentro de los parámetros del buen tiempo que ofrece alta mar.
Durante un recorrido por el lugar, fue posible conversar con Juan Bancalari, presidente de Puerto Bahía, quien ofreció detalles sobre el ‘show’. Explica que una ballena macho adulta llega a pesar hasta 40 toneladas, y ver este enorme mamífero marino saltar como si fuese un delfín es un espectáculo único.
“Esto lo hacen los machos como parte del cortejo para conquistar a la hembra. Otro de los atractivos de esta excursión es ver a los pequeños ballenatos nadando junto a sus madres y cómo ésta los guía y los protege”, cuenta.
Dice que en esta temporada ofrecen tours y una oferta de descanso única para quienes desean pasar un fin de semana en armonía con el mar y todo su entorno.
Comenta que desde su complejo, es posible ir a observar las maravillas del mar, y que disponen de excursiones para visitar la zona donde están las ballenas jorobadas.
La temporada se inició en el mes de enero y se extenderá hasta marzo, período en que estas viajan desde el frío norte hasta las cálidas aguas dominicanas para aparearse y reproducirse.
Durante el paseo por el lugar, donde un grupo de comunicadores pudo mirar de cerca la travesía de las ballenas, se pudo notar que el referido proyecto turístico es un santuario para los entusiastas de la naturaleza, de la aventura y de los que aprecian la comodidad y el lujo. De esto son testigos los miles de turistas que recorren el lugar en su ‘water shuttle’ a Cayo Levantado, todos los días desde la marina, saliendo a las 12:00 del día y regresando a las 4:00 de la tarde.
Los atractivos en alta mar
Se trata de un complejo construido adoptando la arquitectura mediterránea. Tiene la finalidad de que toda la familia dominicana disfrute lejos de la cotidianidad, mientras navegan las paradisiacas playas que ofrece la península.El hotel abrió sus puertas a finales del 2010, con una refrescante propuesta en la que conjuga el lujo casual con un impresionante entorno natural. Si los huéspedes o visitantes lo que desean es escapar de la cotidianidad y relajarse lo lograrán gracias al espectacular contraste que ofrece el azul turquesa del mar y el verde radiante de las montañas que rodean todo el entorno.
Se trata de un complejo construido adoptando la arquitectura mediterránea. Tiene la finalidad de que toda la familia dominicana disfrute lejos de la cotidianidad, mientras navegan las paradisiacas playas que ofrece la península.El hotel abrió sus puertas a finales del 2010, con una refrescante propuesta en la que conjuga el lujo casual con un impresionante entorno natural. Si los huéspedes o visitantes lo que desean es escapar de la cotidianidad y relajarse lo lograrán gracias al espectacular contraste que ofrece el azul turquesa del mar y el verde radiante de las montañas que rodean todo el entorno.
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