Santiago. La Catedral Metropolitana Santiago Apóstol (El Mayor) cumplió 125 años de su consagración y está considerada el monumento ecléctico por excelencia de esta ciudad.
Conocida como la antigua Iglesia Mayor de Santiago de los Caballeros, fue construida entre 1868 y 1894, consagrada el 21 de enero de 1895, en la festividad de Nuestra Señora de la Altagracia, bendecida el 22 de diciembre de 1901 y dedicada el 24 de abril de 1993.
El historiador Edwin Espinal refiere que el templo religioso es considerado el monumento ecléctico por excelencia de la ciudad y ocupa el espacio reservado a la iglesia parroquial desde la tercera fundación de la ciudad en 1562. La catedral es sede de la Arquidiócesis de Santiago de los Caballeros y fue declarada Patrimonio Nacional por decreto 172-91 del 29 de abril de 1991.
Construcción
En su construcción intervinieron el maestro albañil Onofre de Lora, los ingenieros el francés Henry Thomasset, el norteamericano Lawson B. Bidwell y otro conocido como el ingeniero Castillo. Espinal recordó que en la catedral se halla sepultado el ex presidente Ulises Hereaux, ajusticiado en Moca en 1899. La fachada principal es cerrada por tres puertas talladas con siluetas de motivos urbanísticos y alegóricos a pasajes del Evangelio referentes a Jesús, a los apóstoles Santiago y Juan y a la batalla de Santiago del 30 de marzo de 1844, obras del escultor francomacorisano Gaspar Mario Cruz.
Las dos últimas grandes intervenciones realizadas a la catedral Santiago Apóstol sucedieron entre 1987 y 1993 y 2009 y 2012. Para festejar su consagración, este sábado 1 de febrero, Espinal tiene contemplado la realización de una visita guiada, para aquellos interesados en conocer detalles de su construcción. La actividad está pautada para las 4:00 de la tarde.
Es una de las reliquias de la ciudad de Santiago
La catedral cuenta con un carrillón de cuatro campanas encargadas a la casa Paccard, de Annecy, Francia, la misma que fabricó el carrillón de la basílica de Higüey. Instalado en la torre sur, fue bendecido en 1980. Las campanas, que al repicar imitan las notas DO, RE, MI y LA, fueron donadas por las familias Haché Zogbi, Reid Cabral y Vicini Cabral y el Ayuntamiento de Santiago
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