El “buscón” del viaje ilegal en que salieron varios dominicanos, dos de ellos desaparecidos en el naufragio cerca de la Florida el pasado 23 de enero, fue identificado como Amaly Dipré, y su ayudante como Uriol Soto, ambos residentes en la comunidad de Boca Canasta, en la zona costera de la Playa Los Almendros en Baní.
Los indocumentados habrían pagado 20,000 y 22,000 dólares a Dipré, para que les sacara los documentos y los enviara hasta Las Bahamas. Mientras que el papel de Uriol era de intérprete.
Pues según se informó, Amaly no hablaba inglés y Uriol era su intérprete cuando conversaba con el “coyote” que estaba en Bahamas.
Tanto Dipré como Soto son conocidos en Boca Canasta como deportados de Estados Unidos y que en la actualidad emprendieron la huida.
Con miedo, los familiares de los dos desaparecidos hasta la fecha del naufragio de 40 indocumentados donde solo sobrevivió el colombiano, no dan detalles de esas dos personas.
Los desaparecidos hasta el momento son Wilkin Romely Méndez Pérez, con 18 años, y Yunior Pascual Santos Báez, de 49 años.
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