El capellán de la Policía Nacional, Alejandro Cabrera, insistió hoy en que la delincuencia hay que enfrentarla con manos dura, al referirse a los asesinatos de varios agentes policiales por parte de delincuentes para quitarles las armas de fuego.
“El demonio está suelto, hay que tomar mano dura, hay que enfrentar esa delincuencia sea como sea”, dijo.
Sostuvo que no es posible que estén acabando con la familia, porque el policía también tiene una familia y tiene su doliente.
Reiteró que es bueno enfrentar esa delincuencia en el campo que sea y que la justicia apriete.
“Hay que apretar, no se puede venir con paño tibio, hay que tomar las cosas por el mango, porque si seguimos así vamos a tener un país completamente inseguro”, manifestó.
Cabrera fue entrevistado al finalizar la misa dominical que celebra en la sede de la PN, a la cual no asistió el director de la institución, Nelson Peguero Paredes.
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