Tras una reunión ayer entre autoridades haitianas y dominicanas que se prolongó por cerca de cuatro horas, las partes alcanzaron un acuerdo que establece la reapertura de la frontera dominico-haitiana al comercio de mercancías entre ambos países.
Este paso de conciliacion en la disputa de carácter comercial llega justo un día después de que los haitianos radicalizaran su postura de cierre de la franja fronteriza a través del trecho terrestre con Dajabón, empeorando aún más la crisis, al frenar con más fuerza el tráfico de patanas y camiones, y el ingreso de dominicanos que realizan trabajos especializados en ese país.
Esto provocó que el mercado binacional pautado a su reapertura el viernes último aquí terminó en fracaso, debido a las nuevas disposiciones adoptadas por la parte haitiana.
Entretanto, ayer, en otra nota discordante con la actitud del vecino país, el ministro de Relaciones Exteriores, Roberto Álvarez, rechazó una publicación del medio haitiano Rezo Nodwes, intitulada “¡Alerta!, en la que previene al presidente Jovenel Moise de un presunto llamado del lado dominicano para tratar sobre una nueva delimitación del territorio fronterizo
A esto, el ministro respondió asegurando que durante el encuentro entre autoridades haitianas y dominicanas no se habló de una nueva delimitación de la frontera, sino el único propósito de esa jornada del 21 de octubre “determinar la trayectoria de la línea divisoria entre los padrones 239, 240 y 241, así como la ubicación del padrón 251”.
Solución al problema.
En el encuentro se acordó permitir, gradualmente, el intercambio comercial entre haitianos y dominicanos mañana lunes, pero en cantidades pequeñas y que el sábado se informará la fecha de reapertura al comercio de manera definitiva.
Esto acuerdo también permite a dominicanos y haitianos que laboran en diversas áreas de la economía, tanto aquí como en Haití, transitar sin problemas, y luego de terminar sus jornadas laborales retornen a sus países.
El encuentro se llevó a cabo en el salón de actos de la alcaldía local y lo encabezaron los alcaldes de Dajabón, Santiago Riverón, y de Juana Méndez (Haití), Lumber Demetrius, respectivamente.
En la reunión, las autoridades de ambos países se comprometieron a establecer medidas sanitarias para evitar que comerciantes y compradores se contagien del Covid-19.
Causante de problemas
El impedimento de Haití a la compra de mercancías en República Dominicana por parte de sus nacionales creó mucha tensión al cruece de la frontera, porque al llegar a su territorio les fueron incautadas y tiradas al río Masacre.
El problema alcanzó mayor grado de intensidad cuando del lado haitiano se formaron grupos de civiles con armas de fuego, palos y otros objetos, actuando en la confiscación de mercancías de sus compatriotas.
Según se supo en la zona, esta acción la llevaron a cabo, presuntamente, empleados al servicio del Ayuntamiento de Juana Méndez.
Las protestas de los afectados siguieron toda esta jornada de conflictos por las medidas puesta en vigor por las autoridades haitianas, al recibir a nada el intercambio comercial por esta zona de Dajabón.
Asimismo, ciudadanos dominicanos que realizan trabajos especializados en Haití, como pintura, plomería, electricidad y mecánica denunciaron la restricción a su ingreso a territorio del país vecino.
Joseph Faduith:
No entrará nada de RD
Lo que agravó más el problema fue una advertencia del responsable haitiano de Migración en Juana Méndez, Joseph Faduith, cuando dijo que a su país no entraría nada procedente de República Dominicana, aunque puso la excepción para la zona franca Caracol, tras un acuerdo con sus ejecutivos.
Mientras tanto, el alcalde de Juana Méndez, Lumber Demetrius, fue firme al advertir de que ha llegado el momento de establecer reglas claras en el intercambio de negocios con Republica Dominicana.
“Lo quieren todo...”
Sostuvo que debe existir equidad entre los dos países, alegando que los dominicanos “lo quieren todos para ellos”. Demetrius sostiene que hace falta una ronda de diálogo entre las autoridades de los dos países para alcanzar un acuerdo y establecer mecanismos sobre el funcionamiento de los dos mercados, “porque ahora no se trata de uno”.
En la ciudad de Juana Méndez, a escasos metros del centro urbano de Dajabón, la Comunidad Europea, construyó una edificación para alojar el mercado bilateral de allí.
En tanto, el alcalde Dajabón, Santiago Riverón, manifestó que las autoridades municipales de Dajabón están acompañando a los comerciantes locales para articular un plan piloto que permita volver a utilizar las instalaciones del mercado.
las autoridades dicen que pretenden restablecer la feria común, pero sin las aglomeraciones masivas de personas.
LOS PROBLEMAS
Antes del acuerdo
El pasado viernes, cientos de haitianos hicieron filas desde la madrugada, tratando de ingresar a territorio dominicano, pero no pudieron hacerlo, porque las autoridades haitianas cerraron el portón con candados y lo mismo hicieron sus pares dominicanos.
Comerciantes y compradores haitianos cruzaron el río Masacre y adquirieron algunas mercancías, pero al llegar a su país, inspectores del Ayuntamiento de Juana Méndez se las quitaron y luego las arrojaron a la fuente hidríca.
Otros haitianos que, en un intento por burlar la vigilancia militar para entrar de manera irregular a suelo dominicano, son apresados y devueltos por Migracion dominicana a su país, dijeron oficiales castrenses. Esto no está gustando a Haití, que alega malos tratos a sus compatriotas por parte de militares, algo que el Cesfront y el Ejército han negado.
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