SANTO DOMINGO, República Dominicana.- Un grupo de empresarios galleros llegó al país el día 11 de julio de este año procedente de Honduras en el mismo jet privado que despegó la noche del miércoles del aeropuerto Las Américas, de Santo Domingo, rumbo al aeropuerto de Punta Cana, y que todavía se desconoce su destino final.
De acuerdo con las investigaciones que realizan las autoridades, una vez los empresarios de diferentes nacionalidades bajaron del avión Hawker Siddele HS-125 con matrícula estadounidense N600AE, los pilotos de declararon la aeronave con “fallas mecánicas” y fue llevada a la zona de Aviación General.
Según nuestro corresponsal Pavel Arias, trascendió también que este mismo avión había dado otros dos viajes a República Dominicana desde Venezuela.
Se informó que los dos pilotos Fabio Urbina y Héctor Ríos, se presentaron como mecánicos de la aeronave supuestamente averiada y que tras su reparación, realizarían un vuelo de prueba desde el aeropuerto Las Américas a Punta Cana.
Sin embargo, los pilotos una vez despegaron del aeropuerto de Las Américas y tomaron rumbo desconocido.
Según la agencia de aviación estadounidense (FAA, por su sigla en inglés) el avión está registrado a nombre de una empresa con sede en el Estado estadounidense de Delaware.
Todo el personal de seguridad del aeropuerto Las Américas que estuvo de turno cuando despegó la aeronave era interrogado el viernes para determinar posibles complicidades.
Hermetismo
Un gran hermetismo rodea en el aeropuerto de Las Américas el caso de la salida del avión la noche del miércoles.
Fueron inútiles los esfuerzos hechos por los periodistas que cubren la fuente de Las Américas en obtener una reacción del caso por parte del jefe del Cuerpo Especializado de Seguridad Aeroportuaria y de la Aviación Civil (CESAC), pese a que se dijo que hay varios militares bajo investigación.
“El general Aracenis Castillo de la Cruz esta en reunión con todos los representantes de las agencias de investigaciones del Ministerio de Defensa y cuando termine hablará con ustedes”, fue la respuesta recibida del asistente del alto oficial.
Además de los militares del CESAC que estaban de servicios en la terminal, también son investigados sobre el caso, empleados de compañías privadas que brindan servicios en el aeropuerto.
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