LA VICTORIA Cárcel sería un laboratorio de transformación de mentes

Declaraciones. Tomás Holguín La Paza, director de Prisiones.Santo Domingo

Convertir la Penitenciaría Nacional de La Victoria en un laboratorio de transformación de mentes, donde cada hombre que sea recluido en ese penal sea objeto de investigación, para determinar la razón por la cual cometió el acto delictivo, y de esa manera garantizar su total regeneración, es el sueño que quiere hacer realidad el director general de Prisiones, Tomás Holguín La Paz.

El estudio del comportamiento de los internos, según Holguín La Paz, irá en coordinación con las más de diez disciplinas técnicas que la Escuela Vocacional de las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional ofrece a los internos en el penal de La Victoria, con la finalidad de contribuir a su inserción en la sociedad cuando cumplan sus condenas.

“Si nosotros tenemos recluido un hombre 10 o 15 años, vamos a estudiarlo y analizarlo, para que junto con la capacitación que les estamos brindando, el Estado tenga la información de sus ciudadanos, para cuando ese hombre regenerado salga de la cárcel, no le pase ni por asomo volver a delinquir”, expresó Holguín La Paz.

Reveló que llegó al país con esa visión, luego de viajar a Australia y visitar la cárcel Victoria, con más de 6,200 internos, la cual funciona como un laboratorio de transformación de la personalidad humana.

“La ciudad Mirror, donde está ubicado el penal, es la segunda ciudad más segura del mundo. Todo el que entra a ese penal, sea por la condición que sea, es objeto de estudio y de análisis de su comportamiento personal, y no sale de ahí sin un perfil hecho por profesionales”, asegura Holguín La Paz.

Manifestó que es digno ver cómo tantos profesionales se dedican a estudiar la conducta humana del que comete algún acto delictivo, “y eso es lo que tenemos que hacer aquí, no permitir que nadie salga sin antes saber por qué cometió un delito”.

Dijo que en Corea vio un politécnico penitenciario, donde imparten todas las disciplinas. “Ahí vi que los mejores técnicos de las compañías multimillonarias Hyundai y Honda, enseñan a los reclusos su sistema para construir motores y nuevos diseños de vehículos”, reveló.

Expresó que hace unos tres años el 98% de los que integran la dirección general de Prisiones no sabían cuál era la misión que tenían.

“Hemos descubierto que la misión de nosotros es regenerar a nuestros internos por medio de las escuelas vocacionales, y lo que nos resta es seguir ese camino”, dijo.