Un grupo de activistas que protestaba en el municipio italiano de Ventimiglia (noroeste) por el cierre de la cercana frontera con Francia a los inmigrantes se enfrentó a la policía y, durante el choque, falleció un agente de un infarto.
El enfrentamiento se produjo cuando la policía intervino para desalojar una antiguo parque de bomberos ocupado por los activistas, que protestan en los últimos días por la situación que viven los inmigrantes en Ventimiglia, a quienes se les impide pasar a Francia.
Los medios locales informaron que durante el desalojo, en un clima de tensión, un agente de cincuenta años cayó al suelo y, tras ser trasladado al hospital de Sanremo, falleció posiblemente tras sufrir un infarto.
El gobernador de la región de Liguria (noroeste), Giovanni Toti, confirmó la muerte del policía y expresó en Facebook su "rabia por los irresponsables que alimentan las tensiones y provocan desencuentros en un clima ya dramático", en alusión a los activistas.
Finalmente fueron arrestados 23 activistas "anti fronteras", la mayoría de ellos piamonteses y algún francés e inglés, que serán expulsados del territorio nacional.
A Ventimiglia, a orillas del Mediterráneo y fronteriza con Francia, llegan numerosos inmigrantes que desembarcan en las costas del país con la intención de cruzar el confín y proseguir su viaje generalmente hacia el norte europeo.
No obstante las autoridades galas impiden desde el año pasado su paso por la frontera, lo que provoca que queden bloqueados en el municipio italiano, donde se reparten entre diversas instalaciones de acogida a menudo en medio de precarias condiciones.
Los activistas han convocado una manifestación para el domingo en Ventimiglia para protestar "contra las precarias condiciones de vida, la inaceptable condición en la que se encuentran y la privación de libertad de movimiento" que sufren los inmigrantes.
El gobernador ligur opinó que en Ventimiglia "hacen falta agentes, mano dura con quien obstaculiza a las fuerzas del orden y que todos los inmigrantes sean identificados y, quien no tenga documentación, sea detenido y expulsado"..
"Basta de hipocresía y de perder el tiempo. Que el Gobierno intervenga con fuerza mañana", señaló el gobernador conservador, en referencia a la manifestación convocada para mañana por los activistas, que mantiene alta la tensión en la zona.
Ayer alrededor de 140 inmigrantes lograron romper el cordón policial de la frontera y llegar a la localidad francesa de Menton, algunos de ellos arrojándose al mar, si bien fueron localizados por las autoridades galas y devueltos a Italia durante la pasada noche.D EFE
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