Personas que residen en los alrededores de una empresa que se dedica a triturar botellas de vidrio a cielo abierto se quejaron de las molestias que les causa el polvillo que sale del lugar.
El negocio, que opera en el sector La Ciénaga, del kilómetro 14 de la autopista Duarte, tiene el frente y los laterales medio cerrados, pero la parte trasera está totalmente abierta, por lo que los pedazos de vidrio caen en el patio de las casuchas que quedan por debajo del nivel de la calle y el polvo cubre toda el área.
Con evidente temor, algunos vecinos se niegan a hacer pública su denuncia, pues aseguran que los propietarios de la empresa son personas “poderosas” y temen a represalias.
Dicen que es un mal que les afecta desde que se instaló el negocio hace más de un año, y que algunos se han enfermado de asma y hasta de la vista.
Los cristales triturados son sacados del lugar en patanas con letreros de Greenlogix, la cual se promueve en la Web como una compañía que “se dedica a la recolección de desechos generados por las operaciones de su empresa para que estos sean reciclados y reutilizados en otras aplicaciones”.
Además de vidrios, Greenlogix asegura que recicla papeles, cartones, plásticos, metales, equipos electrónicos y desperdicios de construcción.
Domingo Frías, uno de los residentes en el lugar hace más de 20 años, asegura que deben mantener las puertas y ventanas de su vivienda cerradas todo el día. Magdalena, de su lado, quien vive frente al negocio, también se queja de las pequeñas partículas de vidrio que entran a su casa, donde reside con su hija.
Explica que la situación es tan grave que no se puede siquiera dejar los calderos destapados, “porque uno siente que se come el vidrio”.
“El polvo está afectando a todos los que vivimos cerca del negocio, pero no voy a decir nada”, sostiene una señora que no quiso identificarse y cerró la puerta de la casa, sin abundar sobre el problema.
Una profesional de la medicina, que tampoco quiso ofrecer su identidad, afirma que las partículas producen “neumoconiosis, una enfermedad pulmonar producida por la inhalación de polvo y la consecuente deposición de residuos sólidos inorgánicos, a largo plazo”.
DEFENSA. Los propietarios del negocio aseguran que el proceso que realizan en el lugar no provoca molestias, ya que, según dicen, sólo opera como un centro de acopio y no se realiza ningún proceso industrial, más que el monte y desmonte del material.
“Asumimos que dichas denuncias son programadas por personas con intereses más allá que el social, pues no es la primera vez que esas personas tratan de sabotear nuestra labor ecologista a favor del medio ambiente, donde sacamos gran cantidad de desechos sólidos de las calles y vertederos”, afirman Ernesto Mejía Mazara y Jona- than Linares, administradores del negocio, a través de un documento.
De todos modos, dijeron que harán todo el esfuerzo para corregir cualquier situación que cause malestar a los vecinos. El negocio destruye botellas de vidrios que luego exporta como material reciclable.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario