Las autoridades de Hong Kong han anunciado este lunes que aquellos ciudadanos que hayan sido vacunados contra la COVID-19 podrán reunirse en grandes grupos a pesar de las restricciones impuestas para frenar el avance del virus.
Así, los residentes podrán formar "burbujas de vacunación" y reunirse en grupos de mayor dimensión que los permitidos en restaurantes y lugares de ocio de la región administrativa especial china.
La idea, según la jefa de Gobierno, Carrie Lam, es que esta laxitud de las medidas fomente la vacunación. Además, las autoridades han explicado que se han producido avances en relación a la reanudación de los viajes con Singapur.
El Gobierno también tiene previsto relajar las medidas para todos aquellos trabajadores de aerolíneas que hayan recibido las dos dosis de la vacuna, según informaciones del diario 'South China Morning Post'.
Lam ha destacado, sin embargo, que la cuarta ola de casos "está bajo control" en Hong Kong, al menos "de forma aparente". "Sin grandes brotes Hong Kong puede estar bajo la categoría de zona de bajo riesgo en base a los estándares globales", ha dicho.
En este sentido, las medidas de distanciamiento social, incluida la limitación de los aforos en restaurantes --actualmente se pueden reunir cuatro personas-- se extenderá otras dos semanas, hasta el 28 de abril, para evitar posibles rebrotes.
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