Aunque los delitos de la corrupción y del enriquecimiento a costa de la función pública y de los recursos del Estado se suele observar como un asunto de los políticos, no es menos cierto que los altos mandos militares tradicionalmente han sido señalados, aunque en raras ocasiones sometidos, por estos ilícitos.
Las operaciones anticorrupción identificadas como Antipulpo, Operación 13, Coral, Operación Medusa, Falcóny la más reciente Coral 5G, llevadas a cabo por la Procuraduría General de la República, involucran a 16 militares y policías en un entramado de corrupción en perjuicio del Estado.
Por primera vez, las Fuerzas Armadas tienen en presión a cuatros generales acusados de malversación de fondos públicos, lavado de activos y otras imputaciones penales, según el expediente de la Procuraduría Especializada de Persecución de la Corrupción Administrativa (PEPCA).
Al mayor general Adán Caseres Silvestre, exdirector del Cuerpo Especializado de Seguridad Presidencial (CUSEP) y al general de brigada Juan Carlos Torre Robiou, ex director del Cuerpo Especializado de Seguridad Turística (CESTUR), principales acusados en las operaciones Coral y 5G, se le atribuye un supuesto desfalco al Estado por RD$ 3,000,000,000 durante los ochos años de los gobiernos de Danilo Medina.
Otros seis generales de varias instituciones militares y de la Policía que administraron fondos estatales, han sido investigados por el Ministerio Público con relación a las operaciones anticorrupción de la Procuraduría, , según fuentes del Ministerio Público.
Los tres generales más próximos al expresidente Danilo Medina adquirieron durante su gobierno bienes como villas turísticas, terrenos, proyectos habitacionales, industrias, vehículos de alta gama y otras propiedades que no pueden justificar con el ingreso que perciben como militares.Dinero, que según la acusación del Ministerio Público, era sustraído de los presupuestos de entidades militares y mediante tráfico de influencia para colocar allegados en posiciones administrativas y así tener controles de las finanzas.
Hasta ahora guardan prisión preventiva en la cárcel Modelo hombres de Najayo el mayor general del Ejército Adán Cáceres Silvestre,los generales de brigada Juan Carlos Torre Robiou – FARD-, Julio De los Santos Viola- ERD- y Boanerges Reyes Batista de la misma institución.
En la misma situación están los coroneles Franklin Mata Flores, Carlos Augusto Cruz y Miguel Ventura Pichardo, acusados por el Ministerio Público de las mismas infracciones penales.
Las Fuerzas Armadas, en representación del Ministro de Defensa, teniente general Carlos Luciano Díaz Morfa, han facilitado todas las informaciones y documentos requeridos por la Procuraduría General de las entidades militares envueltas en la investigación, afirman colaboradores cercanos del alto jefe militar.
Con el apresamiento del mayor general Adán Cáceres Silvestre, exjefe de la seguridad del expresidente Danilo Medina, se develó todo un entramado de corrupción que afectó los presupuestos militares de varias de las entidades militares, con miles de millones de pesos aportados por los contribuyentes.
La corrupción fue tal en las Fuerzas Armadas, que tanto el mayor general Cáceres Silvestre como Juan Carlos Torres Robiou son acusados de enriquecimiento ilícito mediante la falsificación de documentos, abultamiento de nóminas para beneficio propio, tráfico de influencia, sobornos y otras penalidades.
La corrupción no es solo civil
La corrupciónno es exclusiva de los funcionarios civiles y sus asociados. También en las cúpulas militares y policiales históricamente se ha practicado la corrupciónpara el enriquecimiento ilícito a costa del Estado.
Los últimos escándalos de corrupción ocurridos en la pasada administración han estremecido las instituciones militares. Al menos cuatro generales que en su momento controlaron las principales entidades del Ministerio de Defensa para beneficio propio, ahora enfrenta cargos en la justicia por delitos penales vinculados a actos de corrupción administrativa.
Los generales y coroneles más cercanos al expresidente Danilo Medina, los que no están presos se encuentran sin funciones en las Fuerzas Armadas, mientras otros fueron puestos en retiro recientemente por el presidente Luis Abinader.
Ahora las autoridades actuales han marcado distancias y prefieren mantener a estos oficiales lejos del manejo de fondos públicos, al no asignarles responsabilidad en las entidades castrenses.
Sin embargo, estos eventos han permitido que las autoridades de las instituciones castrenses refuerzan más los controles en el gasto y transparentar las operaciones que conllevan recursos estatales, mediante el saneamientos de las nóminas, control en las compras y contrataciones y autoridad presupuestaria, según indica el portal de transparencia del Ministerio de Defensa.
Oficiales de diferentes instituciones militares y de la policía guardan prisión preventiva o son investigados con relación a la sustracción de fondos públicos provenientes de los presupuestos de las Fuerzas Armadas y de la Policía Nacional durante el periodo 2012-2020 FUENTE ACENTO.COM
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