Estudiantes de la escuela Santa Teresa de Jesús, en la Zona Universitaria, revelaron ayer cómo algunos profesores han ejercido maltrato físico contra ellos injustamente.
Narraron que una de sus profesores solía corregirlos dándole por la espalda y empujándolos cuando peleaban entre ellos.
“A una niña que está en mi curso la maestra le dio un trompón y tenía la espalda rojita”, manifestó una alumna de cuarto de básica al referirse a las agresiones que recibieron de la educadora.
Otra de las alumnas dijo que “un día ella (la profesora) me empujó por la espalda sin yo hacerle nada”, y agregó que cuando dos compañeros se peleaban, la educadora “le daba golpe al inocente y no al culpable”. En ese mismo plantel otros alumnos dijeron que una sustituta de su maestra, que labora en el área administrativa, “grita y dice malas palabras en el curso”.
La directora de esta escuela, María Tavares, dijo que los maltratos de profesores a estudiantes son sancionados en diferentes instancias del sistema educativo, por lo que invitó a los alumnos que denunciaron agresiones físicas a pasar por la dirección para tomar las medidas correspondientes.
Resaltó que en la escuela Santa Teresa de Jesús se aplican las “Normas del Sistema Educativo Dominicano para la Convivencia Armoniosa en los Centros Educativos Públicos y Privados que puso en vigencia el Consejo Nacional de Educación en julio del 2013”.
Tavares habló del tema al valorar el proyecto “Hoja de Ruta 2015-2018” para la Prevención y Eliminación de la Violencia contra los Niños, Niñas y Adolescentes en República Dominicana”, por considerar que servirá de guía para aportar a un mundo sin violencia desde las escuelas.
“El proyecto me parece interesante para la disminución de la violencia, tanto en las familias, como en los centros educativos y los diferentes ámbitos de la sociedad”, dijo Taveras al ser consultada sobre el proyecto que ejecutará el Consejo Nacional para la Niñez y Adolescencia (CONANI), auspiciado por la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Tavares se mostró consciente de que la violencia genera violencia, por lo que rechazó aplicar cualquier tipo de maltrato físico al momento de corregir a los estudiantes. “Si los niños ven que les pegan eso harán ellos con los demás compañeros”, dijo.
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